Los complementos dictan la moda 2026: menos prendas, más estilo

La moda contemporánea ha dejado atrás la idea de revolución para abrazar una contrarrevolución. El protagonismo ahora recae en los complementos: bolsos, cinturones, zapatos y joyas han dejado de ser simples accesorios para convertirse en piezas clave que transforman cualquier atuendo.

Esta tendencia ha sido confirmada por Valentina Suárez-Zuloaga, CEO de la plataforma de moda Es Fascinante y directora creativa de la pasarela MBFWMadrid. Según ella, invertir en complementos permite renovar una prenda sin gastar mucho, además de ser una estrategia que grandes casas de moda están usando para conectar con nuevos públicos a través de piezas más accesibles.

“La moda no está en plena revolución, sino en una renovación sin tanto riesgo”, explica Suárez-Zuloaga. Y ese enfoque ha marcado las colecciones para la primavera-verano de 2026.

El regreso a los clásicos y la estética versátil

En las pasarelas recientes, se ha notado una clara vuelta al archivo de las casas de moda. Las siluetas estructuradas, chaquetas con hombreras, faldas asimétricas y tonos intensos como rosa, amarillo o el blanco neutro "Cloud Dancer" —elegido por Pantone como color del año— están dominando las propuestas.

Chanel, por ejemplo, ha sorprendido con una colección sin hilo conductor tradicional, apostando por mezclas poco convencionales que funcionan para mujeres de todas las edades. Lo mismo ocurre con otras marcas que priorizan patrones fluidos y prendas que no se ajustan al cuerpo, favoreciendo el movimiento libre y un estilo más práctico.

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Los diseñadores también están dando espacio a prendas con historia. Es el caso de los bloomers, pantalones cortos abullonados del siglo XIX que regresan con fuerza este verano, vistos en colecciones de Prada. Junto a ellos, los pantalones bombachos, estilo jogging y la cintura baja vuelven a estar en tendencia, no solo en denim, sino también en faldas.

Colores, texturas y bolsos icónicos en el centro de la escena

Jack McCollough y Lázaro Hernández han tomado las riendas creativas de Loewe con una colección enfocada en los más jóvenes: pantalones de gran tamaño, minifaldas y una paleta vibrante en tonos naranja y amarillo. Fendi, por su parte, incorpora mariposas y motivos naturales en prendas que buscan transmitir alegría, sin dejar de lado el estampado animal, que sigue vigente.

Los flecos también vuelven como recurso estético. En las propuestas de Elisabetta Franchi alargan las faldas; en Michael Kors y Bottega Veneta adornan bolsos; y en Givenchy se incorporan en los zapatos.

En este panorama, los bolsos son más que un complemento: son el corazón de muchas colecciones. Max Mara ha reeditado su icónico Whitney, mientras que Loewe celebra el décimo aniversario de su Hammock Flip con un nuevo lanzamiento. Fendi, incluso, ha creado una colección cápsula inspirada en la serie Emily in Paris, usando los escenarios de rodaje como plataforma de promoción.

Moda 2026: inversión en estilo con sentido

Este movimiento en la moda demuestra que las tendencias ya no se miden solo por lo extravagante, sino por la versatilidad, el diseño estratégico y la conexión emocional con las prendas. Las grandes firmas han entendido que el primer contacto con su marca muchas veces se da a través de un accesorio: una pieza que tiene impacto, historia y funcionalidad.

Si estás pensando en actualizar tu guardarropa, esta temporada ofrece una oportunidad para hacerlo desde los detalles: un bolso que se vuelve protagonista, un cinturón fino que transforma un look, o un par de zapatos con carácter.

Más allá del lujo, la moda vuelve a mirar hacia su archivo y su esencia, conectando pasado y presente con un lenguaje visual contemporáneo.