Migración salvadoreña en San Diego y Tijuana se reduce drásticamente

La migración salvadoreña en la frontera entre San Diego y Tijuana ha caído a niveles históricos. En apenas dos meses, solo 17 salvadoreños fueron detenidos intentando cruzar irregularmente hacia Estados Unidos, una disminución del 93 % respecto a años anteriores, según datos oficiales.

“Lo que estamos observando ahora es algo que no había visto en 27 años de mi carrera”, afirmó Alfonso Martínez, subjefe de la Patrulla Fronteriza, en una conferencia ofrecida a medios salvadoreños. Su diagnóstico fue claro: la frontera está sellada.

Entre el 1 de octubre y el 12 de diciembre de 2025, solo 17 salvadoreños fueron detenidos intentando cruzar por este sector, según datos de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP).

Un muro reforzado y playas vacías

Durante un recorrido de casi 15 kilómetros, desde la playa hasta la comunidad Nido de las Águilas en Tijuana, agentes fronterizos confirmaron que los intentos de cruce se han reducido drásticamente.

“En el año fiscal 2024 hubo más de 3,500 salvadoreños que cruzaron de manera ilegal en el sector de San Diego. En 2025 fueron poco más de 500 personas y en lo que va del año fiscal 2026 llevamos menos de 20”, explicó Gerardo Gutiérrez, agente de la CBP.

El contraste con años anteriores es impactante. “Pasamos de registrar hasta 10 capturas diarias a no reportar ninguna durante cuatro días seguidos”, agregó Gutiérrez.

Las playas, donde antes era común ver lanchas o personas intentando ingresar por mar, ahora están bajo una vigilancia reforzada. Sin embargo, sigue siendo una ruta peligrosa. “Hace dos semanas cuatro migrantes murieron cuando su lancha volcó en el mar”, recordó el agente.

Una caída histórica en detenciones

Alfonso Martínez detalló que las detenciones totales en este corredor han caído hasta en un 93 %. En el año fiscal 2025 fueron detenidas 49,902 personas de distintas nacionalidades. En 2024, la cifra superó los 324,000. “Antes teníamos hasta 2,000 personas por día, ahora son unas 30”, afirmó.

Los cambios responden a un aumento de controles y vigilancia. “Nuestra prioridad es la preservación de la vida. Una sola muerte es demasiado”, enfatizó Martínez, al referirse a los riesgos del cruce marítimo y las nuevas tácticas de los grupos criminales.

Entre las estrategias más utilizadas por los coyotes está el uso de drones para detectar puntos vulnerables. “Ya están usando drones para ver dónde nos encontramos y mandar a los grupos donde no estamos en ese momento”, explicó Gutiérrez.

Drones, escaleras y alambres

El muro que divide ambos países se ha convertido en una carrera de ingenio. Para evitar los controles, los coyotes ahora guían a los migrantes a través de drones, escaleras o zonas sin vigilancia. “Es como subirse a una palmera y luego saltar”, describió el agente Luis Sarabia.

Por esa razón, las autoridades han instalado alambre a lo largo de varios kilómetros del muro y han redoblado esfuerzos en los puntos menos protegidos.

Otra modalidad detectada son los túneles excavados desde el lado mexicano. “Hemos descubierto más de 90 túneles. En el año fiscal 2025 se detectaron dos, aunque no fueron usados”, explicó Gutiérrez.

Te puede interesar: Estados Unidos sigue siendo el principal destino de migrantes salvadoreños

Según los agentes, los coyotes ya no cruzan junto con los migrantes, sino que coordinan desde fuera. Una persona en el lado estadounidense los recoge, lo que complica las detenciones.

“Estamos al tanto de estas tácticas y seguimos adaptando nuestras estrategias”, aseguró Sarabia. Sin embargo, advierten que los riesgos siguen latentes.

Un muro más extenso, una frontera más cerrada

Este corredor fronterizo abarca 60 millas. De ellas, 14 tienen doble muro y más de 50 cuentan con algún tipo de estructura. Apenas nueve millas permanecen sin barrera física.

Las cifras evidencian una disuasiva eficaz: menos salvadoreños arriesgan su vida al intentar cruzar. Aun así, las autoridades insisten en que quienes lo hacen enfrentan riesgos extremos, especialmente si optan por rutas marítimas.

“Los grupos criminales dicen que es la manera más fácil, pero lo que vemos son muertes”, señaló Martínez. La vigilancia continua y los refuerzos han convertido a esta zona en una de las más controladas de la frontera sur.

El mensaje de los agentes es claro: la frontera entre San Diego y Tijuana ya no es una opción viable para los migrantes salvadoreños. El paisaje desolado de este paso histórico es testimonio de un cambio drástico en las rutas migratorias hacia Estados Unidos.

*Con reportaje de El Diario de Hoy