Olga Tañón celebra sus raíces con nuevo disco que une al Caribe

La merenguera puertorriqueña Olga Tañón estrenó su nuevo álbum, PR24SIETE - Soy de aquí, una producción que combina los ritmos del Caribe con sonidos contemporáneos para reafirmar su identidad artística y proyectar la música boricua al mundo.

Conocida como La Mujer de Fuego, Tañón explicó que el disco “está lleno de fusiones que nos conecta con Puerto Rico y el mundo entero”, una declaración que refleja su visión de unir culturas a través del arte.

El material reúne ocho canciones, siete de ellas reinterpretaciones del cancionero popular puertorriqueño, entre las que destacan “Mañana por la mañana”, “Yo me tomo el ron”, “El jolgorio” y “Si no me dan de beber”.

Con arreglos que incorporan elementos naturales y texturas inspiradas en el entorno caribeño, la artista busca un equilibrio entre la nostalgia y la innovación sonora.

“Este proyecto requirió tiempo, dedicación y sacrificio, pero también contó con el privilegio de reunir a productores y compositores de gran nivel, quienes hicieron posible esta nueva etapa de mi carrera”, expresó Tañón en un comunicado.

Un viaje musical que honra el Caribe

La producción de PR24SIETE - Soy de aquí estuvo a cargo de Billy Denizard, esposo de la cantante, junto a los productores Genio La Musa, Came Beats y Eliot ‘Mago D Oz’, conocidos por su trabajo en la música urbana y tropical. El resultado es un álbum que combina merengue, pop latino y sonidos electrónicos, sin perder la esencia festiva que caracteriza a la intérprete.

El lanzamiento oficial tendrá un capítulo especial el 15 de noviembre, cuando Tañón presente parte del repertorio en el Hard Rock Live de Hollywood, Florida, en un espectáculo que promete ser un homenaje a su trayectoria y a la música del Caribe.

A lo largo de casi cuatro décadas de carrera, Olga Tañón se ha consolidado como una de las voces más reconocidas del merengue y la música tropical. Desde sus inicios en los años 80, cuando fue descubierta por casualidad en una audición para una banda de rock —que en realidad resultó ser una orquesta de merengue—, ha sabido transformar los “errores felices” en oportunidades que marcaron su destino musical.

La constancia de Olga Tañónm: una artista sin fronteras

Ganadora de Grammy y Latin Grammy, Tañón ha mantenido una carrera sólida gracias a su energía escénica, su voz poderosa y su capacidad para adaptarse a los cambios musicales sin perder autenticidad.

En 2025, Billboard la reconoció con el Premio a la Trayectoria Musical de Mujeres en la Música Latina, destacando su influencia y su récord de 29 canciones en el top 10 del chart Tropical Airplay, más que cualquier otra artista femenina.

“Este premio significa todos los sacrificios hechos, todas las noches nunca perdidas; aprendidas, mucho mejor decir. Es un recordatorio de que hemos hecho lo correcto”, expresó Tañón durante la ceremonia.

Con humildad, también dedicó el reconocimiento a las nuevas generaciones de mujeres que desean abrirse paso en la industria musical: “Ojalá que muchas jóvenes se animen a continuar esta hermosura que no es fácil, pero es maravillosa”.

Con PR24SIETE - Soy de aquí, la cantante reafirma ese espíritu de renovación constante. Lejos de aferrarse al pasado, apuesta por un sonido que conversa con las tendencias actuales, sin perder la raíz caribeña que la define. Su objetivo, según ha dicho, es “mantenerse vigente sin cerrarse a las innovaciones”, una filosofía que se refleja en cada nota de su nuevo disco.

Conexión con el público latino

Para el público latinoamericano, y especialmente para la diáspora puertorriqueña y caribeña en Estados Unidos, el nuevo álbum de Olga Tañón representa algo más que música: es una celebración de identidad y pertenencia. Su propuesta trasciende el entretenimiento, evocando la nostalgia del terruño y la alegría compartida del Caribe, elementos con los que también se identifican comunidades salvadoreñas y centroamericanas que viven fuera de su país.

En tiempos donde las fusiones musicales dominan el panorama latino, Tañón demuestra que la tradición puede convivir con la modernidad. Con su característica energía, la “Mujer de Fuego” vuelve a recordarle al mundo que el merengue sigue vivo, evolucionando y conectando generaciones a través del ritmo y la pasión.