Fundación Coatepeque alerta de riesgo ambiental en el lago por nuevas construcciones

La Fundación Coatepeque mostró su preocupación, a través de un comunicado, por los impactos ambientales que, prevén, generará  un recién anunciado proyecto que contemplan construir en el lago de Coatepeque.

La Fundación indica que el desarrollo de estas iniciativas plantea riesgos ambientales, sociales y de gobernanza que deben ser atendidos con responsabilidad por parte de las autoridades, antes de avanzar en su ejecución.

En el comunicado consignó que en la primera fase del nuevo proyecto se duplicará la cantidad de viviendas no comunitarias existentes en la cuenca del lago de Coatepeque, lo que provocará una disminución significativa en la recarga hídrica debido a la extensa impermeabilización del terreno. 

“Esto implica graves riesgos en el manejo de la escorrentía de aguas lluvias e incrementará la probabilidad de inundaciones en comunidades y propiedades situadas en la parte baja de la cuenca, comprometiendo la seguridad de los habitantes y la estabilidad de los ecosistemas”, consignó la Fundación.

Otro de los inconvenientes que prevé se generen con el proyecto es el “incremento considerable” en la generación de desechos sólidos y aguas residuales (negras y grises), así como una mayor demanda de agua proveniente de los mantos acuíferos del lago.

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“Asimismo, el desarrollo afectará un corredor biológico clave dentro de la Reserva de Biósfera Apaneca-Ilamatepec, generando impactos irreversibles para la biodiversidad de la zona”, indicó en otra parte del documento.

También advirtió que aumentará la carga vehicular sobre la ya limitada calle circunvalación en el sector de Santa Ana Centro, lo cual ejercerá mayor presión sobre la infraestructura vial existente y “afectará negativamente la calidad de vida de quienes habitan y visitan la zona”.

Sin embargo, la Fundación Coatepeque señaló, ante el pronunciamiento, que busca que el desarrollo turístico de la cuenca siempre sea planificado y ejecutado bajo principios de sostenibilidad ambiental, legalidad y pleno respeto al entorno.

“Como organización comprometida con la protección y conservación ambiental de la cuenca,

manifestamos preocupación por las características del proyecto (...) y su impacto sobre el ecosistema”, señaló la Fundación.

También solicitó a diferentes entidades gubernamentales a que ejerzan sus funciones de regulación, fiscalización y gestión ambiental con la finalidad de velar por la conservación de la cuenca del lago de Coatepeque y por el bienestar de las comunidades que la habitan. 

Entre las instituciones a las que pide su intervención está la Autoridad Salvadoreña del Agua (ASA), Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), Ministerio de Salud (MINSAL), Administración Nacional de Acueductos y Alcantarillados (ANDA), Ministerio de Obras Públicas y Transporte (MOPT), Ministerio de Turismo (MITUR),  Dirección de Ordenamiento Territorial y Construcción (DOT) y la Alcaldía de Santa Ana Centro.

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Área protegida

El lago de Coatepeque fue declarado, en febrero del año pasado, como Área Natural Protegida (ANP).

La declaratoria fue emitida por el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), convirtiéndo el lugar en la ANP número 194 del país.

Dos meses después, Medio Ambiente también decretó Estado de Emergencia Ambiental en el lago por un plazo de 12 meses debido al posible desastre natural en su cuenca, la cual posee 68.69 kilómetros cuadrados.

El decreto estableció acciones de mitigación y prevención ante el deterioro causado al ambiente y posibles riesgos a la salud de la población debido a la proliferación de cianobacterias del género Limnoraphis. 

Una de las medidas implementadas en el lago de Coatepeque fue la instalación de sesenta boyas ultrasónicas que tienen la finalidad de descontaminar el cuerpo de agua.

Las mismas cubren el 48% del lago y permitirán eliminar hasta el 90% de las algas, sin utilizar productos químicos y funcionando con energía solar, indicó el Ejecutivo en su momento.

La inversión en la implementación de dicha tecnología fue de más de $6.7 millones.