En Venezuela comandos armados resolverán la grave escasez…

No se pueden acaparar pollos ni fruta ni pescados ni mariscos ni pan ni huevos ni vegetales ni embutidos ni lácteos, pero todo eso falta en tiendas y supermercados venezolanos "a causa del acaparamiento"

descripción de la imagen

Momento cuando Talbot le pega la patada al rival. Foto EDH

Por

2015-02-09 5:00:00

Comandos populares militares” van a destacarse en supermercados y comercios de Venezuela “para agilizar y erradicar las colas de compradores”, declaró el segundo a bordo de la dictadura, Diosdado Cabello, denunciado por el ABC de Madrid como cabecilla de un cártel de narcotraficantes.

En las calles de Venezuela es evidente la escasez de todo aunque hay abundancia de droga, considerando los fraternos vínculos entre la narcoguerrilla colombiana y los “bolivarianos”. Y al usar el término “bolivariano” toda persona de bien se acongoja por el manoseo sacrílego que se hace del apellido de El Libertador.

Como sentenció un magistrado salvadoreño con respecto a demandas salariales, “si no hay dinero, no hay dinero”, de Venezuela se puede decir que “si no hay pollos, no hay pollos”, les guste o no les guste.

Es un misterio de dónde van a sacar los “comandos populares militares” alitas de pollo, papel higiénico, jabones, pasta de dientes, gotas para ojos, caramelos, champú y así en adelante, si todo eso dejó de fabricarse en Venezuela a causa de las expropiaciones de Chávez. Tampoco van a importarlos porque no hay dólares.

Para “acaparar, quien lo haga incurre en altos costos, sobre todo al tratarse de alimentos perecederos. Hay que tener instalaciones, refrigerar, custodiar, además de que no tiene sentido pues el mercado demanda esos productos.

Aceleradamente los venezolanos están cayendo en las hambrunas socialistas que son lo opuesto de las abundancias capitalistas. Churchill dijo que el capitalismo es el reparto injusto de la riqueza, mientras el socialismo es el reparto igualitario de la miseria.

¿Por qué hay escasez de todo en Venezuela? La versión oficial es que “…tenemos que entender que estamos en una guerra en este momento desatada en el sector económico”, dijo Cabello, tras acusar a los partidos opositores de estar incitando a esa guerra económica junto a un grupo de empresarios que reciben instrucciones del “imperialismo norteamericano”.

Y lo mismo dijo Medardo, el que dirige a los rojos en este país, a su regreso de un viaje a Venezuela: todo es obra de enemigos del régimen, de una guerra no declarada.

No van a unirse los productores para paralizar la producción

Qué tienen que ver los pollos, los detergentes o el papel higiénico con el imperialismo, es un misterio, como tampoco se entiende el que existan acaparadores, esos siniestros enemigos de los pueblos, cuando podrían vender a sus anchas dada la gran necesidad que tienen los venezolanos de comida y de artículos de uso doméstico.

No se pueden acaparar pollos ni fruta ni pescados ni mariscos ni pan ni huevos ni vegetales ni embutidos ni lácteos, pero todo eso falta en tiendas y supermercados venezolanos “a causa del acaparamiento”. Inclusive hay un dicho de que a los tres días el pescado apesta, se acapare o no se acapare…

Acaparar pollos es tenerlos en el gallinero comiendo sin rendir ganancia alguna, como acaparar granos es además de costoso un riesgo por la humedad, los insectos y ratones, las fluctuaciones en los precios.

No cuadra lo del imperialismo ordenando a cada avicultor, a cada fabricante de enseres domésticos, a cada tendero, a cada negocio que dejen de producir, de fabricar, de cultivar, de vender, para satisfacer las estrategias geopolíticas de Washington o de la Comunidad Europea.

Tampoco se van a unir productores locales para no hacer nada, pues nadie va a mantenerlos. Digan al panadero que deje de hacer pan…