Hemos sido testigos de que en la actual campaña electoral los candidatos ofrecen cualquier tipo de propuestas y promesas, sólo falta que nos ofrezcan ríos de leche y miel, las ofertas son de un sin fin de maravillas que rayan en la fantasía.
Me llamó la atención la información brindada por un alcalde de oriente, en un debate televisivo, cuando su adversario ofrecía y prometía la luna, el sol y la tierra, el alcalde informaba que la comuna que preside sólo recibe cierta cantidad de recursos, de los cuales más del 50% se destina a salarios, por lo que queda un pequeño margen de recursos para invertir en obras. Esa es la realidad de la mayoría de las alcaldías. Las promesas que ofrecen no son realistas y con ese populismo andan pregonando a lo largo y ancho del país.
Al escuchar tantas ilusorias propuestas es más que obvio que la mayoría de candidatos a alcalde no conocen la normativa del Código Municipal, las atribuciones de los concejos y sus competencias, no digamos los recursos reales con los que cuenta cada uno de los 262 municipios. Lo que más está de moda es hablar del tema de seguridad y hacer ofrecimientos irrealizables, como tener Cuerpos de Agentes Municipales, armados hasta los dientes como si tuvieran competencia constitucional en la lucha contra la delincuencia. No se escuchan propuestas destinadas a mejorar el entorno económico de los municipios, que les generen recursos adicionales y nuevos empleos.
Por ejemplo, enfocar los esfuerzos municipales hacia la generación de oportunidades y promoción del desarrollo económico sostenible, permite mejorar la competitividad de los municipios, dinamizar la inversión y el turismo local, y, con ello, propiciar el progreso económico sostenible. El Artículo 4, Numeral 9, del Código Municipal estipula que compete a los municipios: “La Promoción del desarrollo industrial, comercial, agropecuario, artesanal y de los servicios; así como facilitar la formación laboral y estimular la generación de empleo, en coordinación con las instituciones competentes del Estado.”
Existe un proyecto de USAID para la Competitividad Municipal y el Programa de Simplificación de Procedimientos para el Registro y Funcionamiento de Empresas, que diversas municipalidades implementaron, de manera satisfactoria, al crear espacios de atención especializados para las empresas (ventanillas), con el ánimo de ofrecer trámites más ágiles, transparentes y con menor cantidad de requisitos, visitas y costos para los empresarios y dueños de negocios.
El objetivo del proyecto es determinar el nivel de apego a los modelos de trabajo implementados para obtener importantes reducciones en términos de tiempo, pasos, requisitos, visitas, documentos internos, personas y departamentos involucrados, entre otros.
El país necesita escuchar propuestas de los candidatos a alcaldes encaminadas a construir herramientas que midan el clima de negocios en los municipios. Un clima local que sea favorable a los negocios conduce a mejores estándares de vida, mejor desempeño del sector privado, más inversión a nivel de los territorios y más oportunidades de empleo.
Las propuestas deberían ir orientadas a mejorar las áreas relacionadas a los costos de entrada, a eliminar barreras a la creación de empresas nuevas y proactividad en la innovación para atraer inversión privada.
Es necesaria la mejora continua de servicios municipales orientados a la atención de las necesidades del sector privado y público para que los ciudadanos reciban servicios de calidad. En cuanto a las tasas e impuestos, enfocarse a la necesidad de incrementar la eficiencia de los impuestos locales, para brindar una mejor calidad de servicios municipales. Tiempo en cumplir con regulaciones y el número de ellas.
Erradicar de raíz pagos ilícitos, ya que estos erosionan la confianza, incrementan los costos empresariales y afectan negativamente la calidad de bienes y servicios.
* Colaborador de El Diario de Hoy.
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