Las redes del CYTED

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/ Foto Por Archivo

Por Por Pedro Roque*

2014-10-11 6:00:00

¿Sabe qué es una red de investigación científica? ¿Y sabe cuántas hay en Latinoamérica? Pues yo no lo sabía y lo entendí este jueves durante la presentación del secretario general del CYTED (Programa Iberoamericano de Ciencia y Tecnología para el Desarrollo), sobre las oportunidades de cooperación e intercambio de conocimientos, experiencias y visitas técnicas a otros países, para grupos de investigación, o bien, investigadores o científicos salvadoreños. Pregunté qué es un investigador y me respondieron, que es alguien que parte de su tiempo y su trabajo académico o científico, lo dedica a la investigación, es decir, a buscar y encontrar algo nuevo que no conocemos en relación asuntos que le interesan a la sociedad, a un sector industrial o incluso al gobierno.

En los países latinoamericanos miembros del CYTED hay trabajando dieciséis mil investigadores en tres mil grupos de científicos, principalmente en Argentina, Brasil, México y Cuba. De El Salvador la participación es poca, pues sencillamente aquí casi no se investiga. La Universidad Nacional tiene muy pocos proyectos de investigación y las universidades privadas se han focalizado principalmente en el negocio de la enseñanza y las maestrías. Las áreas de trabajo en las que pueden participar los investigadores salvadoreños sumándose a las redes internacionales son, la agroalimentaria, la salud, el desarrollo sostenible, el cambio global y ecosistemas, las tecnologías de la información y las comunicaciones, en asuntos correspondientes a la ciencia y la sociedad y, naturalmente, las energías.

Ojalá que poco a poco se vaya desarrollando el espíritu investigador en nuestro país y así como vemos que unos jóvenes ganan premios importantes internacionales en química, también veamos cómo investigadores salvadoreños inventan o descubren algo para curar enfermedades o encontrar solución a los graves problemas nacionales o internacionales. Por ejemplo, me explicaron que ya se dispone de un genoma de frijol que se cocina en solo 15 minutos. Pues que bien, además del tiempo que le dedican las amas de casa a la preparación de los cientos de miles de toneladas de frijoles que se cocinan en Latinoamérica, imagínese la energía calorífica en leña, gas o electricidad que se ahorrará. Y como este, hay una infinidad de temas que se pueden investigar en El Salvador con la colaboración de científicos de otros países.

Este programa se creó en 1984 en España pero se quiere que poco a poco tengan más protagonismo los investigadores latinoamericanos y la expectativa es que en el futuro sea más un programa latinoamericano que español.

*Ingeniero. Columnista de El Diario de Hoy.