Recorrer las calles de San Salvador siempre es un aliento de esperanza a la labor que realizamos desde la Alcaldía capitalina para beneficio de todos los ciudadanos.
Siempre he creído que los funcionarios públicos no debemos dirigir las instituciones desde un despacho, lo tenemos que hacer a partir del contacto con el ciudadano, es visitarle en sus colonias, barrios y comunidades para conocer sus expectativas.
Cada visita que hacemos a un centro poblacional capitalino es una oportunidad que tengo con niños, jóvenes y adultos, para definir qué podemos hacer mejor, pero lo más importante es que tengo el honor de que me compartan sueños y aspiraciones sobre cómo construir una mejor ciudad.
Ese quizá ha sido el éxito de esta administración y es que no hemos estado regidos por un plan de gobierno elaborado con visión ideológica o partidaria, sino que nuestro trabajo tiene su sustento precisamente en ese ideal de capital que tenemos todos los que acá vivimos.
Por eso, hemos dado un impulso a nuestras políticas y ordenanzas de participación ciudadana, a fin de generar mayores espacios para que los capitalinos puedan ser parte esencial de la construcción de ese San Salvador en el que todos podamos vivir, crecer, trabajar y desarrollarnos hasta alcanzar nuestros sueños.
En ese sentido, quiero compartir con ustedes, que producto de ese trabajo iniciado hace cinco años, recientemente tuve el honor de recibir en nombre de la Alcaldía de San Salvador un reconocimiento por parte de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, al haber logrado posicionar a la capital entre los 20 municipios que obtuvieron mejores resultados en el marco de la elaboración del Índice de Competitividad Municipal. Vale la pena mencionar que al llegar a la administración ocupábamos la posición 26, ahora la número 8.
Sin embargo, es prudente acotar que el reconocimiento recibido no es para Norman Quijano o el Concejo, ya que habernos ubicado en dicha posición es producto de un trabajo conjunto entre la administración, los empleados, que han asumido el compromiso de servir al capitalino; los ciudadanos y en este caso particular la empresa privada.
Hace cinco años sólo teníamos una visión que era apostar por el desarrollo de la competitividad en la capital como uno de los pasos para mejorar la calidad de vida de sus habitantes, ya que un ambiente propicio para la generación de negocios es un ingrediente fundamental para que mejore la oferta de empleo.
Ahora, producto de esta relación armónica entre gobierno local y empresarios hoy tenemos las mesas de diálogo público privados, constituidas en los distritos de la ciudad, desde donde se generan diferentes acciones a ejecutar para tener mejores oportunidades de desarrollo en la capital, así como iniciativas que mejoren el entorno en el cual se encuentran las empresas.
Esta es sólo una expresión de la confianza que ha depositado la ciudadanía hacia esta administración y que se manifiesta en el acompañamiento al trabajo que la municipalidad realiza en su beneficio, ya que somos percibidos como gestores eficaces.
Sin el acompañamiento de los vecinos en las mesas temáticas, distritales, zonales, el trabajo que realizamos en las comunidades no puede tener ningún impacto. Trabajamos de la mano con ellos y ellos trabajan de la mano con nosotros, incluso para apoyar la adecuada utilización de los recursos a través de la Mesa de Contraloría Ciudadana.
Consideramos que el trabajo que se ha hecho hasta la fecha y que comenzó con un paso el 1º de mayo de 2009 nos llena de mucho orgullo, especialmente cuando nos encontramos a un niño que disfruta sus estudios en nuestros CDIs; un joven que se incorpora a ser parte de nuestras escuelas deportivas o del Juventud Olímpica Municipal, o una joven madre que encuentra en la capacitación técnica del Centro de Formación Laboral una oportunidad para hacer realidad sus sueños.
Son múltiples historias de cambios positivos las que hemos cosechado en estos cinco años, precisamente porque les servimos a ustedes y nuestro compromiso es seguir trabajando de la mano de lo más valioso que tiene la capital: su gente, porque eso es lo que hace de San Salvador una ciudad con futuro.
*Alcalde de San Salvador.