La empresa panificadora Lido recibió el reconocimiento “El Quijote”, entregado por la Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI), por su larga trayectoria en el país.
Con este galardón se reconoce “la valentía y determinación de los empresarios, y se otorga a empresas emblemáticas de la industria con más de 50 años de fundación y en manos de empresarios salvadoreños, en reconocimiento a su esfuerzo por sobrepasar con éxito las adversidades durante los últimos años”, indicó un comunicado emitido por la ASI.
“La presea que se entrega está representada por la imagen de El Quijote junto a su fiel colaborador Sancho Panza, arrodillados con la mirada hacia el cielo, en actitud de humildad y agradecimiento a Dios por el camino recorrido y los logros alcanzados”, añadieron.
De acuerdo con Roberto Molina, presidente de Lido, quien recibió el galardón con mucha satisfacción tiene el orgullo de que su empresa genera empleos desde 1944; y planea seguir creciendo.
Foto EDH/ René Estrada
“Para los próximos años pensamos abarcar el mercado centroamericano, y expandir más el mercado de Estados Unidos”, recalcó.
La empresa Lido se posicionó en el país por sus productos más reconocidos que incluyen los cakes, magdalenas, alemanas, pan de caja y otras variedades que la marca ha “convertido en elementos propios de la cultura urbana salvadoreña”.
De acuerdo con la Asociación, el impacto de la empresa ha sido de grandes proporciones para la cultura salvadoreña, tomando en consideración que desde la década de 1960 y 1970, los cakes de Lido se han convertido en un clásico para las piñatas y celebraciones infantiles.
Firma emblemática
Javier Simán, presidente de la ASI, afirmó que Lido es “una de las empresas más emblemáticas del país, no sólo por la calidad del producto sino también por todas las luchas que han sabido sortear y mantenerse en medio un mundo cada vez más competitivo”.
La ASI destacó que durante el conflicto armado, la compañía “enfrentó dificultades debido al cierre progresivo de los canales de distribución de sus productos. Sin embargo, sería la nostalgia de las comunidades residentes en el extranjero la que la sacaría a flote, al demandar de nuevo sus productos tradicionales en formatos actualizados”.
Asimismo reiteró que en 1971, Lido recibió el premio ASI por sus esfuerzos en impulsar la empresa como una de las más pujantes de la nación pese a que la guerra con Honduras les había cerrado un amplio espacio del mercado en Centroamérica.
Es también por esto que la empresa es galardonada con uno de los galardones más prestigiosas del sector industrial.
El dirigente de la gremial de industriales también hizo hincapié en que la compañía panificadora ha demostrado “tenacidad, esfuerzo constante, innovación, y capacidad de adaptarse a los cambios, todas características que llevaron a las autoridades de la gremial a entregar el reconocimiento”.
Para Simán, Lido cumple y supera cada uno de los requisitos para ser reconocida con esta presea. Explicó que tras su fundación en 1944, por Raúl Molina Cañas, la empresa inició sus operaciones con pocos colaboradores; después de años de inversión e innovación ahora cuentan con 870 colaboradores en el área de producción y más de tres mil empleos indirectos.
Foto EDH/ René Estrada