Además del incumplimiento de convenio que enfrenta el sector agrícola, una nueva preocupación se suma a sus problemas, con la entrada en vigencia de la desgravación arancelaria que iniciará en 2016 como parte del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos (TLC o CAFTA), temen que se ponga en riesgo la producción local.
La desgravación arancelaria implica que los industriales que actualmente pagan 40 % en aranceles para traer arroz americano, a partir del próximo año podrán importar a 36 %, en 2017 a 32 % y así sucesivamente hasta llegar al 2023 cuando estará 0 % arancel.
Para ese año se podrá importar arroz de Estados Unidos sin pagar aranceles, lo que supone una situación “complicada” a los productores salvadoreños ya que podrían ser desplazados porque el sector agrícola de Estados Unidos goza de subsidios, lo que hace bajar los costos de producción y ofrecer un precio más bajo.
“Nosotros necesitamos ver de qué forma puede revertirse el TLC o ver qué se puede hacer ya que esto va a poner en peligro la alimentación del país”, advirtió el representante del sector arrocero en el departamento de La Libertad, Ever Ochoa.
Ante este panorama, al sector agrícola le preocupa que los industriales ya no tendrán que estar sujetos al convenio para poder acceder a una cuota de importación libre arancel, sino que podrán traer producto americano sin la obligación de compra local.
Según datos proporcionados por gremiales de regantes, en el país existen unos 3,000 productores de arroz granza y el promedio de área cultivada en los últimos tres años es de 6,673 manzanas, lo que genera una producción de casi 700 mil quintales al año.
Si la industria local deja de comprar la cosecha de arroz granza nacional, los productores no tienen alternativas para almacenar y vender, lo que afectaría a todo el sector .
Un año complicado para los productores
Este 2015 ha sido un año complicado para los productores de arroz. Primero por el retraso en el establecimiento de precios del convenio, luego por la reducción de ganancias, seguido por la afectación de una parte de la cosecha por el periodo de sequía que enfrentó el país y finalmente por la presencia del ácaro de la vaina del arroz.
En un diagnostico realizado por el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) junto a una delegación de expertos de Cuba, se determinó la existencia real del ácaro, un organismo que se aloja en la vaina del arroz y posee capacidades de defenderse de plaguicidas.
Aunque el MAG ha informado que ya se está trabajando en su erradicación los productores han señalado que si no se controla a tiempo, puede afectar la producción.
El ácaro viene afectando la producción de arroz desde los años 2005-2006, las zonas afectadas son distrito de riego de Zapotitán, en La Libertad; distrito de riego de Atiocoyo Norte y Sur en Nueva Concepción, Chalatenango.