Una vez más la Cámara Salvadoreña de la Industria de la Construcción (CASALCO) reconoció la labor que desempeñan sus agremiados en beneficio del sector en El Salvador, entregando este año el premio Casalco a la empresa Inversiones Omni.
Durante la XXVIII gala de reconocimiento que entrega la industria de la construcción, se destacó el arduo trabajo que ha realizado la empresa merecedora del homenaje, sobre todo en un contexto de mercado local donde las condiciones no son las más favorables.
De acuerdo con el presidente de la gremial, Carlos Guerrero, Inversiones Omni ha logrado fortalecerse a lo largo de su amplia trayectoria, desarrollando obras de mucho orgullo para los salvadoreños, pasando incluso las fronteras y dejando su huella en otros países.
“Es admirable la calidad con la que Inversiones Omni ha ejecutado diversos proyectos durante más de 30 años de experiencia, entre los que destacan carreteras, puentes, agencias bancarias, centros educativos, oficinas corporativas, urbanizaciones, estadios y fábricas, entre otros”, apuntó Guerrero.
Esta empresa ha logrado expandirse a desarrollar proyectos de varios sectores y además a ejecutar obras en Ecuador, Jamaica, Belice, Nicaragua, Trinidad y Tobago, Santa Lucia, Guyana y Aruba, logrando un importante reconocimiento en dichas naciones.
El mérito por su trabajo ha llegado a tal grado que varios contratistas locales han buscado a la empresa para trabajar conjuntamente en asocios, lo cual, no solo pone de manifiesto la capacidad instalada de las empresas salvadoreñas, sino que también la eficiencia y la calidad del trabajo que desarrollan en cada proyecto.
Sobresalen pese a las adversidades
En los últimos años la industria de la construcción, ha recorrido un camino difícil, lleno de retos que han impactado enormemente la actividad productiva, según lo indicó el presidente de la gremial.
Después de más de cinco años desde la crisis financiera internacional, el sector aún están luchando por crecer y por volver a ser una industria de alta generación de empleo.
Las condiciones en el país no les han permitido retomar la dinámica de crecimiento del sector y estos últimos años la situación se ha complicado aún más por temas que les afectan directamente, de acuerdo con Guerrero.
La excesiva burocracia y los prolongados tiempos de respuesta que todavía deben aguardar, obstaculizan las oportunidades para generar nueva inversión privada en la construcción, provocando con ello que cada día sean más los proyectos que tienen en espera de poder ser ejecutados.
Ante esto, el representante del sector insistió que necesitan que independientemente de ideologías políticas o partidarias, se puedan unir esfuerzos y construir juntos una visión de país.
“Necesitamos un gobierno que promueva, coordine y fomente las inversiones por parte del sector privado en nuestro país, de tal forma, que haya mayores oportunidades de generación de empleo por parte de las empresas, necesitamos reglas del juego claras, una mayor certeza jurídica y una fuerte seguridad ciudadana, que nos permita generar confianza con una visión de largo plazo y de esta forma se fomente más inversión, tanto pública como privada”, indicó.
El sector de la construcción sumará un nuevo año sin tener crecimiento en la actividad económica. Su esperanza queda albergada en la ejecución de Fomilenio II el próximo año.