La economía colaborativa revoluciona Amsterdam

Amsterdam se convirtió en la primera ciudad europea en economía colaborativa, una nueva tendencia.

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Dos personas montan bicicleta de una empresa de alquiler llamada "Yellow Bike", que presenta la iniciativa "Yellow Backie", que transforma el espacio de la bicicleta para maletas en un asiento para llevar personas. en Amsterdam, Holanda, Si un turista ve una bicicleta luciendo uno de los bastidores de color amarillo en la calle, se les invita a gritar "Backie!" para conseguir un paseo gratis.

/ Foto Por EFE

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2015-08-17 9:15:00

ROTTERDAM (HOLANDA). La economía colaborativa es un concepto cada vez más de moda en todo el mundo y ahora Amsterdam ha sido nombrado la primera ciudad colaborativa de Europa después de que numerosas iniciativas, colectivos y empresas pusieran de manifiesto el interés por este nuevo fenómeno económico.
La economía y el consumo colaborativo es un fenómeno mundial creciente que promueve el compartir en lugar de poseer e incrementa el valor de la experiencia frente al de la posesión de bienes, según sus partidarios.
Una modalidad motivada por la crisis financiera mundial, mayor preocupación por los problemas ambientales y la sostenibilidad, el desarrollo de internet y las redes sociales o la revalorización de conceptos como comunidad o colaboración,  explicó el cofundador de la iniciativa social SharingNL, Harmen van Sprang.
SharingNL ha sido la plataforma encargada de impulsar la cultura del compartir en la capital holandesa, una iniciativa promovida por el propio gobierno municipal.
Con el reto de adaptar el sistema económico tradicional al nuevo panorama global, SharingNL empezó redactando en 2013 un plan sobre cómo desarrollar un sistema de economía colaborativa en la ciudad y hoy trabajan en un libro, organizan numerosas actividades y encuentros y asesoran a compañías y empresas emergentes para familiarizarse con este nuevo sistema.
La tendencia mplica a sectores muy diferentes, desde alojamiento, turismo, transporte o educación, y que representa cada vez más una oportunidad tanto para empresas como consumidores.
De hecho, han surgido empresas tan diversas como “Peerby”, una aplicación donde vecinos intercambian objetos prestados; “Konnektid”, que pone en contacto a ciudadanos que quieren enseñar con los que quieren aprender; “Rewear”, una plataforma de alquiler de prendas y accesorios de diseño, o “Floow2”, un mercado de intercambio de equipos comerciales, entre muchos otras.