SAN JOSÉ. El presidente de Costa Rica, Luis Guillermo Solís, cumplió ayer su primer año de mandato marcado por un bajo crecimiento económico.
Datos del Banco Central indican que en 2014 Costa Rica registró un crecimiento del 3.5 %, algo que Solís calificó en su informa anual de labores, como “insuficiente” pero “satisfactorio” al estar por encima del promedio latinoamericano.
El presidente dijo que confía en que la reactivación de la inversión en infraestructura impulsará la tasa de crecimiento económico por encima del 4 % este año.
Los portafolios de inversión en infraestructura pasaron de 775 millones de dólares en mayo de 2014 a 2,280 millones a marzo de 2015, según el mandatario.
Los sectores empresariales y la oposición política han criticado al presidente por una “falta de rumbo” en materia económica y han insistido en la necesidad de aumentar la competitividad del país con una mayor apertura a la generación privada de electricidad.
El déficit fiscal que viene acumulando el país desde 2008 y que en 2014 alcanzó el 5.7 % del Producto Interno Bruto (PIB), sigue siendo la principal piedra en el zapato para el Estado, pues no se vislumbra una solución al corto plazo.
Solís ha anunciado proyectos de ley para reformar el impuesto de la renta y para convertir el de ventas del 13 % en uno de valor agregado (IVA) del 15 %, pero ha topado con un muro en la oposición que le exige al Gobierno reducir gastos antes de aumentar la carga tributaria.
El mal ambiente para una reforma fiscal se consolidó a finales del año pasado cuando Solís presentó al Congreso su primer presupuesto, un 19.7 % mayor al aprobado el año anterior.
Entre lo más positivo en materia económica se encuentra la caída de la inflación al nivel más bajo en 40 años con una deflación de 0.06 % acumulada en el primer cuatrimestre de 2015 y un índice interanual del 1.81 % de inflación.
La caída de los precios internacionales del petróleo y la generación de casi toda la electricidad con fuentes limpias en 2015 y por ende tarifas más baratas, ha favorecido la caída de la inflación.
En el país existen 318,810 (22.4 %) hogares en situación de pobreza, de ellos 94,810 están en pobreza extrema (6.7 % del total de hogares del país).
La iniciativa estrella de Solís para el combate a la pobreza es “Puente al Desarrollo”, que tiene como objetivo sacar de la pobreza extrema durante los próximos cuatro años a 54,600 de las 94,810 familias que sufren esa condición en el país.
En cuanto al desempleo, el Gobierno se propuso como meta generar 217,000 empleos en el periodo 2014-2018 mediante un programa con apoyo de las empresas privadas. El dato oficial más reciente indica que el desempleo se ubicó en el 9.7 % durante el último trimestre del 2014, lo que equivale a 220,175 personas. —ACAN-EFE