SURA: Sistema privado de pensiones permite un mayor crecimiento

Un aumento en el PIB y desarrollo de mercados financieros han generado los sistemas privados de pensiones en la región

descripción de la imagen
La compañía SURA elaboró un estudio previsional en seis países de A.L. Foto EDH / Archivo

Por Rodolfo Ortiz negocios@eldiariodehoy.com

2015-03-16 12:00:00

Los sistemas de pensiones, basados en cuentas individuales, han generado un mayor crecimiento económico en varios países de Latinoamérica, a través de un impacto positivo en las áreas de empleo, ahorro, mercados financieros y productividad.

Esa es la conclusión a la que llegó un estudio realizado por la compañía SURA Asset Management en la región.

El estudio se realizó tomando en cuenta experiencias de Chile, Colombia, México, Perú, El Salvador y Uruguay. Aunque los sistemas de cada nación tienen características distintas, SURA logró rescatar algunas lecciones positivas de la implementación de las cuentas individuales para pensiones.

En lo referente a los empleos los resultados fueron diversos, ya que las cuotas de aportación para las pensiones subieron en algunos países mientras bajaron en otros.

El estudio detalló como positivo el hecho de que la cuenta individual genera un sentido de propiedad sobre los ahorros.

Reduce la visión negativa de que el porcentaje que se descuenta al salario es un impuesto. Además permite que el monto mensual de la pensión y otras prestaciones sean mejoradas, según los depósitos que cada cotizante realiza.

Con este cambio cualitativo, el estudio señala que el sistema de cuentas individuales fomenta que los trabajadores busquen pasar del sector informal al formal. Además mejora la productividad.

Por otro lado, ha beneficiado el crecimiento de los ahorros privados (en pensiones y bancos) durante los últimos años.

El documento reseña que en la década de 1980, los ahorros previsionales representaban el 5 % del Producto Interno Bruto (PIB) en Chile, pero para 2009 eran más del 10 %.

En el tema del crecimiento de los ahorros, se observó una mayor eficiencia, modernización y desarrollo del mercado financiero.

Este mercado también se vio beneficiado junto al crecimiento de los ahorros ya que se creó una fuente estable de fondos disponibles a largo plazo.

Como consecuencia se generó una mayor profundidad del mercado bursátil, es decir, la cantidad de empresas y proyectos que utilizaban los títulos valores, acciones y bonos para su financiamiento y un aumento de los inversionistas.

Parte de los ahorros de pensiones se invertían en este sector financiero para generar rentabilidad y ganancias a los cotizantes.

El efecto positivo fue un crecimiento del PIB en los distintos países, debido a la inversión a largo plazo de los fondos. También generó una mayor profundización financiera: ahorros, bonos, capitalización.

SURA también encontró que la creación de los ahorros privados de pensiones también beneficiaron al sector público. El período de transición afectó el déficit fiscal de aquellos países que vieron reducidos los ingresos a los sistemas públicos de reparto. Sin embargo, esto se vio compensando por la mayor inversión realizada con los fondos privados de pensiones.

Los gobiernos encontraron nuevas alternativas para los títulos estatales. Se abrió la posibilidad de pasar la deuda externa desde el extranjero hacia acreedores internos, manteniendo así una diversidad en plazos y tasas de pagos.

Como efecto macroeconómico esto redujo la vulnerabilidad de los países a los shocks financieros externos y también el riesgo cambiario, producto de mantener deudas en monedas extranjeras.

Finalmente, SURA sugirió implementar medidas que perfeccionen los diseños de pensiones en cada país, además de mejorar la información y educación financiera de los cotizantes. El documento señala que es importante definir qué se entiende por una pensión razonable y cómo se calcula, para luego definir los ajustes necesarios.