Los condones se han convertido en un producto de lujo, estos se suman a la larga lista de productos que escasean en el mercado venezolano como harina, leche, papel higiénico, huevos, entre otros.
La caja de condones ha llegado a costar US$755, esto implica que un trabajador promedio tendría que invertir el 85 % de su salario mínimo para adquirir dicho producto, lo que se ha vuelto algo totalmente inalcanzable para cualquier venezolano.
Problema de salud pública
El déficit de dólares y la caída del precio del petróleo en Venezuela, han provocado que las farmacias del centro y del Este de Caracas no cuenten con este método anticonceptivo fundamental para impedir las enfermedades de transmisión sexual, publicó el diario argentino, La Razón.
Según la revista estadounidense Time, una caja de condones tradicionales en EE. UU. tiene un precio de US$21. El director general de Stop VIH, dijo al diario La Razón que “sin condones no podemos hacer nada, la falta de preservativos es una amenaza a todos los programas de prevención”.
Venezuela tiene la tasa más alta de infección por VIH y embarazo adolescente en América del Sur, según estimaciones de Time.
La escasez de condones y otros métodos anticonceptivos, podría obligar a las mujeres a realizarse abortos en clínicas clandestinas, aumentado el riesgo de la muerte materna. Medios de comunicación con presencia en la zona aseveran la escasez del producto en las farmacias locales. CNN, por ejemplo, reportó: “en ocho farmacias en Caracas, se pudo verificar que en cuatro no había preservativos y en las otras se evidenció poca existencia y variedad. (…) en mercados virtuales, los costos son hasta tres y cuatro veces mayores”.
El asunto, que de entrada podría parecer risible, reviste una enorme gravedad: entidades de salud pública ya han advertido que, de no hacerse nada sobre la situación, las tasas de embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual se dispararán por los aires.
“El país está tan mal que ahora tenemos que esperar formados hasta para tener sexo”, declaró Jonatan Montilla al medio El Financiero, de México. Ya Nicolás Maduro había anunciado en 2013 la construcción de una fábrica de preservativos en el país para “blindar a la patria de embarazos precoces”.
“Vamos a instalar un conjunto de fábricas aquí para producir millones de preservativos y ustedes se encargan, el movimiento Jóvenes por la Patria, a distribuir, a reflexionar y a blindar la patria de embarazos precoces”, aseveró el mandatario en su momento.
Pero parece ser que la producción e importación de anticonceptivos en el país es insuficiente, como lo prueban las largas filas y dificultad actuales para conseguir el producto, mientras tanto, los venezolanos no tendrán otra opción que hacer largas filas o prescindir de ellos. —AGENCIAS.