Desde 2009 Guatemala forma parte de la iniciativa Petrocaribe, pero la falta de acuerdos para mantener bajas tasas de interés en la factura de combustible (antes de que el barril de crudo comenzara a bajar) congeló la posibilidad de avanzar en la firma del convenio de cooperación energética.
En noviembre de 2013 la vicepresidente de Guatemala, Roxana Baldetti, externó que el Gobierno abandonaría las gestiones para continuar la adhesión a Petrocaribe. De esta forma marcó un distanciamiento en política internacional con la administración del ex presidente, Álvaro Colom.
La mandataria argumentó en su momento que no se alcanzó un acuerdo para que el cobro de combustible mantuviera una tasa de interés por debajo del 2 %. La solicitud se debía al interés de las autoridades para obtener bajos precios para el aprovisionamiento de combustible.
“Ya no depende de nosotros, sino del país que nos ofrece entrar a Petrocaribe”, fueron las palabras de la vicepresidente según publicó el periódico guatemalteco Prensa Libre. La petición no prosperó y el proceso se detuvo.
Sin embargo, en la actualidad existen otras razones por las que, al menos en el corto plazo, Guatemala no considerará retomar las negociaciones de un acuerdo de cooperación energética con Guatemala.
El director de hidrocarburos del Ministerio de Energía y Minas de Guatemala, Luis Ayala, dijo que Petrocaribe es un mecanismo diseñado para un entorno con altos precios en los combustibles.
“Cuando los precios tienden a la baja, realmente el mecanismo deja de ser operante. Con los actuales precios del petróleo los países logran realizar sus importaciones de una manera normal”, señaló Ayala.
Diversos funcionarios y periodistas consultados en Guatemala apuntaron que además del precio, la administración del presidente Otto Pérez Molina dio pocas razones para abandonar la iniciativa.
De esta forma se pone de manifiesto el carácter político del acuerdo y la poca estabilidad que brinda como alternativa comercial.
El director de hidrocarburos dijo que Guatemala aún es miembro de Petrocaribe, pero no existe un documento para hacer uso del acuerdo energético. “Técnicamente hablando es importante que cada país tenga convenios para garantizar el suministro de diversas fuentes… Ya las consideraciones económicas las tendrá que tomar el sector privado, quien opera el mercado de combustibles en Guatemala”, concluyó el funcionario.