El déficit del estado alcanzará los $1,000 millones, declararon representantes de Fusades durante la presentación del Informe de coyuntura Económica correspondiente al segundo trimestre de este año.
El documento presentado por esta organización consigna que los ingresos se han desacelerado, manteniendo una tasa de crecimiento de enero a mayo de solo 1 %. Los ingresos tributarios, al mes de julio, estaban $186.6 millones por debajo de las proyecciones del Ministerio de Hacienda.
La recaudación de varios tributos ha caído como consecuencia de la baja actividad económica de algunas empresas, las cuales tienen menos impuestos que reportar.
El impuesto sobre la renta cayó en $9.6 millones y los ingresos por los aranceles de importación bajaron en $4.1 millones, ambos al mes de mayo.
Fusades señaló además que los ingresos al presupuesto nacional se vieron resentidos con la declaración de inconstitucionalidad del impuesto a las llamadas telefónicas desde el extranjero y el Fondo de Atención a Víctimas de Accidentes de Tránsito (Fonat).
Debido a la baja recaudación, el centro de análisis insistió en la necesidad de crear mecanismos para el control de gastos. Iniciativas como la ley de responsabilidad fiscal, la cual sigue en discusión, que deben ser mejoradas para incluir un acuerdo de los diferentes sectores de la sociedad.
Fusades también hizo un balance de los recién aprobados impuestos, los cuales calificó como insuficientes para resolver el problema fiscal. Además señaló algunas debilidades en el paquete aprobado por el partido FMLN y sus aliados. El pago mínimo de renta, sobre la base de los activos, corre el riesgo de ser declarado inconstitucional al igual que sucedió con el 1 % de las ganancias hace unos años.
El impuesto a las transacciones, señaló Fusades, crearía distorsiones y aumentaría los costos de los servicios financieros. Además la organización insistió en el efecto cascada según el cual muchos productores, grandes o pequeños, trasladarían el nuevo impuesto a los precios al consumidor.
Proveedores y gastos
De acuerdo con Fusades, los gastos del Estado se han contraído en $193.2 millones lo cual puede considerarse como positivo, infiriendo ahorro o gasto más eficiente. Sin embargo, el informe señaló como preocupante que la reducción se debe a dos rubros importantes para el desarrollo social: la inversión pública y las transferencias corrientes.
En las transferencias la reducción es causada por el atraso de pagos a los proveedores del Estado. Situación que afecta a programas como los uniformes escolares en el cual llevan hasta 8 meses de retraso en el pago a sastres. Se incluye además el atraso en la pensión universal para adultos mayores, la cual administra el Fondo de Inversión Social para el Desarrollo Local (FISDL).
En cuanto a las inversiones públicas (programas, infraestructuras, etc.) Fusades destacó que $207.3 millones del presupuesto general de la nación no se han ejecutado.
Fusades consigna en su informe que la reducción en la inversión pública es preocupante porque “históricamente se ha considerado que es demasiado baja para lograr las metas de crecimiento”.