Debido la vinculación con múltiples sectores económicos, la Corporación de Exportadores de El Salvador (Coexport) informó que por el cierre de las principales fronteras terrestres, durante la semana pasada el país perdió alrededor de $50 millones, aproximadamente.
Esto, se enfoca en rubros como alimentos y bebidas, productos perecederos y bienes para las maquilas, donde, la dependencia de materias primas importadas para la producción y el estancamiento en las lineas de manufactura implicaron hasta acumulación en bodegas y suspensión de contratos de compra y venta.
Por ello, y ante la continuación del cobro de $18 por servicios de inspección no intrusiva debido a una “mala interpretación” del Ministerio de Hacienda, Coexport pidió a la Asamblea Legislativa, al igual que la Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI), una “interpretación auténtica” de las disposiciones excepcionales de la Ley de Simplificación Aduanera y mayor información para no afectar al sector, entre otras medidas.
Pablo Durán, presidente de Coexport, explicó que los vehículos de transito internacional son todos aquellos que conllevan una importación o exportación, por lo que, según el decreto y el artículo 12-B reformado, no deben de pagar los $18.
“Cuando hay facturas, documentos y autorizaciones de una mercadería que va fuera del país o va a ingresar estamos hablando de tránsito internacional. Pero la gente de la aduanas sigue cobrando porque las autoridades (de Hacienda) no han explicado el espíritu de la reforma durante los 180 días”, explicó el líder gremial.
En este punto, la directora ejecutiva de Coexport, Silvia Cuéllar agregó que siguen los problemas de interconexión entre el Centro de Trámites de Importaciones y Exportaciones (Ciex) y el sistema Manpago y que incluso muchos empresarios están realizando trámites con usuarios y contraseñas temporales.
“Estamos pagando pero no llega a tiempo el registro. Muchos dueños de carga le están dando a los motoristas los $18 porque la situación aún no ha cambiado en los pasos fronterizos, sobre todo por la desinformación”, insistió Cuéllar.
Los principales exportadores afectados fueron aquellos que envían la mercadería desde el país vía terrestre hasta Puerto Cortés (Honduras) o Puerto Barrios (Guatemala). Luego realizan envíos por carga consolidada en buques de gran calado hasta la costa este de Estados Unidos pero, dados los problemas fronterizos, hasta un 35 % de las entregas llegó con retrasos, lo cual obligó a los empresarios a pagar multas y montos compensatorios.
“A veces los sistemas aduaneros son incompatibles con el proceso comercial internacional de cumplir con los tiempos. Todo es cuestión de mantener la cadena productiva dentro y fuera del país”, analizó Durán.
Para solucionar la cuestión informativa, Cuéllar confirmó que el próximo viernes sostendrán una reunión intrasectorial con la Dirección General de Aduanas para explicar como funciona el sistema, aunque mantienen la posición de que el cobro “ya generó un problema competitivo al país”.
“Empresarios de Costa Rica o de Nicaragua nos llaman y nos dicen que para viajar a Guatemala ya no es atractivo ingresar al país, que prefieren usar los pasos fronterizos que han habilitado en Honduras. Esa es una clara señal de poca competitividad, desde aduanera hasta de logística y conectividad vial”, sintetizó.
Según cálculos de los exportadores, el gobierno debería de pagar durante los seis meses de suspensión un aproximado de $3.8 millones al asocio Cotecna-Smiths por el uso del sistema de rayos X, un monto que califican de razonable en función de los pagos impositivos del sector y la carga tributaria que aportan.