A menos de seis meses de terminar este Gobierno, la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma (CEPA) presentó ayer un plan maestro a 30 años, para finalizar la Fase II de la modernización del Aeropuerto de El Salvador e iniciar el proceso de ampliación.
El proyecto, valorado en un estimado de $490 millones, fue anunciado ayer en un contexto donde el centro de conexiones (“hub”) de Avianca en el país apunta a un crecimiento del 31 % para diciembre de 2014 (un estimado de 1.1 millones de pasajeros adicionales), según cifras de la institución.
Sin embargo, CEPA aún no logra definir si el megaproyecto se realizará bajo la modalidad de Asocio Público Privado, ya que hasta febrero del próximo año estará listo el estudio de “valor por dinero”, con el cual se definirá el modelo de gestión más apropiado para financiar el desarrollo de las fases I y II.
Según Alberto Arene, presidente de CEPA, en mayo de 2014 se terminará el plan de rehabilitación, con especial énfasis en la pista de aterrizaje, calles de rodaje y otros servicios de diversa demanda. Luego de estas obras se pasará a la fase II de la rehabilitación a un monto de $31.5 millones, de los cuales $23.5 millones se obtendrán con una nueva emisión de titularización en la Bolsa de Valores, aún no definida. “No tenemos fecha para lograr cerrar este proceso. Pero tenemos que afrontar la situación de creciente demanda para absorber el incremento de pasajeros”, reconoció Arene.
En este punto CEPA realizará una “etapa cero” de ampliación, después de las dos fases de modernización para ampliar de 18 a 23 las posiciones de estacionamiento para aeronaves y se construirán cinco nuevas salas de espera para posiciones remotas, nuevas áreas migratorias y apertura de otras áreas para pasajeros y acompañantes.
Luego de estas mejoras CEPA iniciará la primera etapa de la ampliación en enero de 2015 por un valor de $115 millones, con lo que se logrará atender demandas de hasta 3.5 millones de pasajeros cada año.
En perspectiva, Jorge González, representante de Kimley-Horn, la empresa que desarrolló el plan maestro por un monto de $427 mil, consideró que el documento de trabajo le dará “mayor orden” a las obras y que a largo plazo la terminal aérea crecerá hacia el oriente (zona de la base aérea actual), junto con una nueva terminal de carga que movilizará 125, 500 toneladas día a día. “Es una solución sistemática. Al sector privado le pueden interesar las zonas extraportuarias, ya sean cadenas hoteleras, industrias, zonas francas y otro tipo de negocios”, indicó González.
Al final de la ejecución de este proyecto, el plan maestro incrementará la capacidad para movilizar a más de 6.6 millones de pasajeros anuales y contará con 43 posiciones de estacionamiento, entre otros aspectos.
Las cuatro fases se realizarán con el enfoque de zonas comerciales y extraportuarias.