WASHINGTON. Boeing dijo que no tiene planes de reabrir las negociaciones con un sindicato que representa a los trabajadores del estado de Washington, quienes rechazaron un contrato laboral vinculado al nuevo avión 777X de la empresa, y agregó que buscaría “extensamente” dónde armarlo.
La semana pasada, los maquinistas del estado de Washington rechazaron en una votación un contrato negociado entre Boeing y los líderes de la Asociación Internacional de Maquinistas (IAM, por si sigla en inglés).
El texto propuesto habría mantenido la producción de la rentable serie de aviones de fuselaje amplio de Boeing en el área de Seattle a cambio de beneficios más bajos.
La compañía va a mantener “todas las opciones abiertas” respecto a dónde armar el 777X y espera tomar una decisión “dentro de los próximos meses”, dijo el presidente ejecutivo de aviones comerciales de Boeing, Ray Conner, durante una rueda de prensa el sábado.
La conferencia se realizó en la víspera del Salón Aeronáutico de Dubai, en donde fuentes de la industria esperan que Boeing lance la nueva versión del modelo 777, con unos 250 pedidos.
Consultado sobre si Boeing estaba dispuesto a volver a las negociaciones con la IAM, Conner dijo: “En este punto, no tenemos planes de hacer tal cosa”.
El ejecutivo dijo que el área de Seattle, donde Boeing construye la mayor parte de sus aviones, no estaba fuera de las opciones pero que la empresa podría buscar otros lugares, como Japón, donde ya se manufacturan las alas de compuestos de fibra de carbono del Dreamliner.
“La votación no salió como esperábamos por lo que ahora estamos explorando todas nuestras opciones respecto al 777X”, dijo Conner. —REUTERS