El Ministerio de Turismo de El Salvador anunció que incluirá en su oferta turística cuatro sitios en el océano Pacífico donde hay barcos hundidos desde hace décadas que han desarrollado ricos ecosistemas, así como una formación geológica en un lago del centro del país.
El nuevo “Corredor de arqueología subacuática” será parte de la “Ruta sol y playa” y será promovido para atraer a los amantes de las prácticas submarinas como el buceo, informó el Ministerio de Turismo en un comunicado.
El documento precisó que en cuatro lugares submarinos se encuentran los barcos “SS Douglas”, “Cheribon”, “San Blas” y “PSJ-2”, que naufragaron en distintas épocas en el Pacífico salvadoreño, algunos cerca de la costa.
A ellos se suma “La caldera del diablo”, una formación rocosa de origen volcánico en el lago de Ilopango (centro).
El ministro de Turismo, José Napoleón Duarte, dijo que el objetivo principal de este nuevo corredor es “generar mayores niveles de visitas y ocupación hotelera, pero también crear un producto que promueva el rescate y conservación de los recursos naturales a través de un turismo responsable”.
Según el comunicado, “los barcos naufragados son estructuras consideradas ecológicamente como arrecifes artificiales, y funcionan como zonas de refugio, alimentación y reproducción para numerosos organismos”.
En vista de esas ventajas, el Ministerio recordó que ya “en varios países a nivel mundial se está generando el hundimiento responsable de estructuras prefabricadas de materiales no contaminantes, como es el caso de barcos, para ser utilizados como arrecifes artificiales”.
“Este corredor, que formará parte de la cartera de servicios turísticos, se ha trabajado en conjunto con los empresarios de la zona como parte del trabajo conjunto para impulsar la afluencia de turistas a la zona costera de nuestro país”, apuntó la nota oficial.
En 2012, el turismo le generó a este país unos 771.6 millones de dólares. —EFE