Moody’s Investors Service mejoró hoy la calificación de la deuda gubernamental de Estados Unidos, a “estable” de “negativa”, y afirmó su grado de Aaa.
La agencia mencionó una sorpresiva caída en el déficit federal, la diferencia entre lo que el gobierno gasta y lo que recauda en impuestos. El gobierno estadounidense se encamina a reportar su déficit más bajo en cinco años.
En los primeros ocho meses del año fiscal, el déficit totalizó $509,800 millones, de acuerdo con el Departamento del Tesoro. Eso es casi $400,000 millones menos que el mismo período el año pasado.
Moody’s había rebajado la calificación a “negativa” hace dos años. Pero nunca fue tan lejos como su rival Standard & Poor’s, que despojó a Estados Unidos de su máxima calificación crediticia en el 2011.
El mes pasado, S&P mejoró su calificación a largo plazo para Estados Unidos, pero mantuvo su grado de AA+, un nivel por debajo del máximo.
La mejora en la economía y recortes de gastos y aumentos de impuestos que entraron en vigor en marzo han reducido el déficit federal.
Aún as, Moody’s advirtió que el gobierno necesitaba controlar los déficits a largo plazo, a medida en que la generación de pos guerra envejece y comienza a colectar Seguridad Social y Medicare, el programa de salud para ancianos. De no hacerlo, se arriesgaría a “presionar de nuevo la calificación”.