Alrededor de 375 pescadores artesanales, asociados en 14 cooperativas de los municipios de La Unión y Meanguera del Golfo, recibieron el paquete de contingencia por parte del Centro de Desarrollo de la Pesca y Acuicultura (Cendepesca) en el marco de la veda al camarón marino.
Los paquetes incluyen 15 libras de frijol, arroz, aceite, harina, azúcar, maíz, leche, espaguetis y otros productos como parte de la canasta básica.
Cendepesca destinó alrededor de 43 mil dólares en la compra de los víveres para el departamento de La Unión.
La donación es en el marco de la veda del camarón que inició el pasado 17 de abril y finalizará el 31 de mayo, tiempo en el que los pescadores tienen prohibido extraer el recurso; pero sí pueden capturar la variedad de pescado y langosta en la zona costera.
Gustavo Portillo, director del Cendepesca, dijo que en Meanguera de Golfo son más de 15,500 pescadores, de ellos solo 375 recibieron los paquetes porque están documentados y agrupados en cooperativas como la ley se les exige.
“Es una lástima que la entrega solo abarque a 375 pescadores que son los que tienen la documentación y en eso nosotros nos cuidamos porque la Corte de Cuentas nos audita y hay una ley que nos rige que sea así”, aseguró Portillo.
Los pescadores que no están organizados en cooperativas serán beneficiados con un bono de 30 dólares con el apoyo del Programa Mundial de Alimentos (PMA).
Previo a la entrega del bono, los técnicos del Cendepesca visitan las comunidades costeras para capacitar a los artesanales sobre la importancia de la veda y trabajar con medios alternativos de vida.
Algunos pescadores manifestaron que al sector le falta la voluntad de asociarse en las diferentes cooperativas que hay en la zona.
La mayor parte de los pescadores de las diferentes comunidades de La Unión, Meanguera del Golfo, Conchagua, e Intipucá así como el resto de las costas del país, cuentan con las redes conocidas como camaroneras, es decir, doble paño de red para lograr la captura del camarón.
Durante la veda tienen prohibido usarlas, por eso muchos suspenden sus faenas porque no tienen otras redes, tampoco los recursos económicos para comprarlas de otras medidas que sean solo para la captura de peces.