Esta semana elsalvador.com te presentó las emotivas historias de cuatro niños que sufrieron la pérdida de sus padres generadas por la espiral de violencia que vive el país.
En los relatos se cuenta cómo cuatro niños, entre ellos tres hermanas, sufren las consecuencias que hereda la inseguridad que ocurre en El Salvador. Todos perdieron a sus padres en hechos sangrientos perpetrados por delincuentes en Santa Ana y San Salvador.
En uno de los casos elsalvador.com te mostró cómo un grupo de niñas vive en un apartado cantón en San Ana, a siete meses de que un comando armado asesinara a sus padres en el interior de una casa. Si durante esos días no las pudiste leer, aquí te las presentamos nuevamente.
Además, te contamos la conmovedora historia de Jorgito, el niño que llorará solo a sus padres asesinados en San Jacinto.
Aunque este pequeño no era hijo biológico de la pareja asesinada en la entrada de los condominios Altos de América en San Jacinto, desde hace meses él los llamaba “sus padres”.
Jorgito de 10 años, no tenía a nadie más en la vida que a Daniel Beltrán y Greys Henríquez, de 21 y 23 años, respectivamente. Su propia madre no lo podía mantener.
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Foto/ Cortesía
La emotiva historia de tres niñas huérfanas que durmieron con los cadáveres de sus padres
Tres niñas de 6, 4 y 2 años que durmieron junto a sus padres asesinados por un grupo de hombres el 13 de octubre, en el cantón Flor Amarilla de Santa Ana, aún sufren las secuelas de esta tragedia.
Doña Blanca es la única que, siete meses después, vela por las niñas. Ella las lleva a la escuela pública. Sus agotados ojos y su cansina espalda no le impiden seguir adelante con el cargo que le dejó la violencia. Su hijo mayor le ayuda con un poco dinero, pero las necesidades son muchas.
Esta es la vida de las niñas que perdieron a sus padres hace casi un añ??o, a causa de la violencia. Su abuela y bisabuela hacen todo por sacarlas adelante, en medio de la dificultad y pobreza.