El éxito de la operación Jaque en contra de la estructura financiera de la mara Salvatrucha (MS) no hubiese sido posible de no haber sido por el apoyo del gobierno de Estados Unidos a las autoridades salvadoreñas.
El subsecretario adjunto para el Hemisferio Occidental de Estados Unidos Juan Sebastián González reveló ayer que la cooperación brindada a la referida operación es parte de la asistencia que el gobierno estadounidense da a El Salvador para mejorar los niveles de seguridad, crecimiento económico y prosperidad.
“La cooperación que el gobierno de Estados Unidos brindó a la operación Jaque que llevó al arresto de varios pandilleros y es algo que tuvo un impacto en la estructura financiera de las pandillas”, dijo González. Agregó que “esos son pasos importantes que tienen que seguir y a largo plazo es crear esas oportunidades (para los jóvenes)”.
Sostuvo que “la cooperación que nosotros llevamos con El Salvador y con los otros países a nivel del FBI, de la DEA y de otros aspectos del Departamento de Justicia, es uno donde nosotros estamos cooperando de manera muy estrecha para proveer asistencia técnica”, dijo González.
Enfatizó que también “ayudar en el desarrollo de unidades especializadas de investigaciones y coordinar entre los esfuerzos aquí y los esfuerzos del Departamento de Justicia de Estados Unidos para acabar con algo que ha afectado la vida de los salvadoreños y estadounidenses”.
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La operación Jaque permitió a la Fiscalía y Policía capturar a más de un centenar de pandilleros y colaboradores, entre éstos empresarios del transporte público. Además confiscaron más de un centenar de vehículos, autobuses, camiones y hasta una pipa que ocupaban para la venta de agua.
Fiscales y policías intervinieron moteles, prostíbulos, y otros negocios ilícitos que manejaban a su antojo los cabecillas de esa pandilla.
De igual manera congelaron no menos de 12 cuentas bancarias que estaban a nombre de “presta nombres”, según las investigaciones de la Fiscalía.
González sostuvo que el golpe más certero que se le puede dar a esas estructuras criminales para debilitarlas es la confiscación de los bienes e inmuebles obtenidos con dinero ilícito.
“Arrestar a alguien es una acción muy importante, es una victoria táctica, pero para llegar a la victoria estratégica en contra de estos grupos criminales, uno tiene que quitarle los bienes financieros, hay que buscar sus bienes y sus estructuras financieras, es la única forma de poder contrarrestar grupos criminales de esa índole”, dijo González.
Agregó que “no es suficiente solo meter pandilleros en la cárcel, asegurar que el sistema judicial beneficie a todos los salvadoreños, sino que también crear las oportunidades económicas y que estas sean el centro de los retos de seguridad del país y eso no es que se cambia de un día para otro”.
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Pidió a no dejarse engañar por traficantes
El subsecretario González pidió a los salvadoreños que estén pensando en viajar de forma ilegal a Estados Unidos, que no arriesguen sus vidas porque el recorrido sigue siendo “sumamente peligroso”.
Agregó que la gente de los países del Triángulo del Norte emigran a Estados Unidos por la falta de seguridad, buscar oportunidades económicas y reunificación familiar.
“La mejor forma de prevenir la inmigración es promoviendo la prosperidad y la seguridad de El Salvador, Guatemala y Honduras”, advirtió González.
Para contrarrestar la inmigración ilegal, los tres países del Triángulo Norte y Estados Unidos impulsan el plan Alianza para la Prosperidad que busca mejorar las condiciones de seguridad y económicas de los centroamericanos.
Para principios del próximo año se espera que sean desembolsados los 190 millones de dólares restantes de los 750 millones asignados al plan por el congreso de Estados Unidos. Sin embargo, los tres países tendrán que cumplir con 16 requisitos que tienen que ver con migración, derechos humanos y combate a la corrupción.
Además de la creación de un grupo consultivo que le dará seguimiento al cumplimiento de los proyectos del plan.