LA UNIÓN. Tras una larga espera, finalmente la Autoridad Marítima Portuaria (AMP), inició las clases en el Centro de Formación del Marino Mercante, ubicado en la Base Naval de La Unión.
El primer grupo de aspirantes a marinos está compuesta por 19 alumnos, procedentes de diferentes departamentos del país.
El proyecto, que fue anunciado en 2013, año en que la AMP y la Fuerza Naval firmaron el convenio para dar vida al Centro de Formación, fue pensado para iniciar en 2014, sin embargo no fue hasta noviembre de 2015 que inauguraron sus instalaciones y en el presente mes han iniciado las clases.
Las autoridades no quieren hablar de atraso en el proyecto, más bien explican que después de firmado el convenio, erogaron los fondos, prepararon a los instructores, que son oficiales que pertenecen al Centro de Instrucción Naval (CEIN) y construyeron las aulas y el área de prácticas.
René Hernández, presidente de la Autoridad Marítima Portuaria, manifestó que el proyecto no ha tenido ningún atraso, pues se trata de un proceso que por ser delicado no podían apresurar.
Los alumnos pasaron por varias pruebas como parte de los requisitos del Manual de Ingresos, entre ellas evaluación psicológica, natación, poligráfica.
Fueron 35 aspirantes, de los que sólo 19 clasificaron para quedarse.
El capitán de navío Francisco Córdoba, director del Cein, detalló que el curso tiene un costo de 690 dólares y que el periodo de preparación es de cinco semanas.
Las clases son de lunes a viernes, de las siete de la mañana a las tres de la tarde.
Los conocimientos que les brindan son en primeros auxilios, prevención y lucha contra incendios.
Además, técnicas de supervivencia en el mar, responsabilidad social, inglés, protección y sensibilización para la gente del mar y todos los procedimientos de apoyo en buque mercante.
Hernández dijo que la responsabilidad no solo es preparar a los futuros marinos mercantes, también es indagar una oportunidad de trabajo y están buscando los enlaces para convenios internacionales, con el fin que estos tengan un trabajo al salir del curso.
“Tenemos varias ofertas de trabajo de algunas empresas locales e internacionales, esperamos en Dios que el proyecto sea de mucho beneficio para la población”, agregó.
En marzo termina el primer curso, el segundo estará iniciando en mayo y dejarán un mes de intervalo para recuperación del material, porque el que usan solo se puede utilizar una vez.
Hay una institución financiera que les ofrece un financiamiento para personas de escasos recursos económicos, para que al empezar a trabajar, cancelen el crédito.
Irvin Garméndez es un estudiantes que llega desde Santa Tecla lleno de sueños no solo por convertirse en un marino mercante, sino por la oferta laboral que puede tener una vez este ocupando un trabajo a bordo de un barco mercante o crucero.
Los costos para él superan más de mil dólares en el curso y van desde alquiler de casa, pago de servicios básicos, transporte y alimentación.
“Es un sacrificio económico que estamos haciendo como familia, con la esperanza de tener una buena oferta laboral, tenemos muchas expectativas”, agregó Garméndez, a la vez que dijo que está seguro que valdrá la pena.
Es el segundo en la región
El vicepresidente de la República, Óscar Ortiz, dijo que la inversión ronda los 250 mil dólares y es el segundo Centro de Formación en toda la región, después de Panamá. Aseguró que han cubierto todos los estándares a nivel internacional. Lo dijo durante la inauguración en 2015