Un grupo de 55 jóvenes y adultos que por diversos motivos dejaron la escuela y quieren seguir sus estudios se sometieron ayer a por la mañana a una prueba de suficiencia que certifique sus competencias académicas para asistir a determinado grado, sea de educación básica, media o superior.
La evaluación, que fue aplicada por la Dirección Nacional de Jóvenes y Adultos del Ministerio de Educación (Mined), tuvo una duración de cuatro horas y los resultados de la misma serán dados a conocer dentro de ocho días.
Angélica Paniagua, directora nacional de Educación de Adultos, expuso que este año la cartera de Estado prevé aplicar 3,500 pruebas de suficiencia académica a nivel nacional en cumplimiento del artículo 63 de la Ley General de Educación.
El año pasado la población examinada fue de cinco mil, explicó.
“La mayoría (de los que realizan el examen) son de bachillerato o de tercer ciclo, pero el esfuerzo está diseñado para poder aplicarse pruebas desde primer grado hasta bachillerato”, aclaró.
Según Paniagua, el proceso es gratuito y para someterse a el las personas se pueden inscribir en las direcciones departamentales o través de proyectos de organismos que colaboran con el ministerio. También lo pueden hacer en Edúcame, a los teléfonos 2593 – 2610 y 2593 2660.
Previo a la prueba los aspirantes pueden someterse a tutorías y también reciben guías de estudio para prepararse. A los tres meses, cuando ya se sienten listos, se someten al examen.
Para esta oportunidad los examinados, que se dieron cita a las instalaciones del Programa edúcame, en la capital, provenían de los municipios de Soyapango, Cuscatancingo y Tonacatepeque, ubicados en San Salvador. También había de Santa Tecla, Santa Ana y Chalatenango.
La funcionaria detalló que cada quince días unas 116 personas se someten a esta evaluación que les da la posibilidad de continuar estudios a través de las modalidades flexibles de enseñanza del Programa Edúcame.
En la actualidad el Programa edúcame atiende alrededor de 20 mil alumnos en las modalidades semipresencial, a distancia y nocturna.
José Salazar, uno de los examinados, dijo que la prueba de suficiencia es una gran oportunidad para seguir estudiando y en este caso a él le da el beneficio de terminar el bachillerato.
En el caso de Yolanda Pérez, otra alumna, dijo que quiere aprovechar para estudiar ahora que sus hijas ya están grandes. Ellas fueron precisamente las que la motivaron.