Un sargento destacado en la subdelegación centro de Soyapango fue brutalmente asesinado por pandilleros tras salir de licencia (descanso).
Los delincuentes le cortaron la cabeza a Baltazar Olaizola Díaz y la metieron en un maletín que luego fue abandonado en el kilómetro 12 de la carretera de Oro, en la urbanización Majucla, Apopa.
Los investigadores descubrieron, ayer por la mañana, que la cabeza pertenecía al sargento, porque dentro de la mochila había un carné de la corporación que está a su nombre.
Las autoridades presumen que los verdugos del policía lanzaron el maletín con el cráneo desde un vehículo. Agregaron que el cuerpo todavía no ha sido encontrado.
Olaizola residía en la colonia Ciudad Obrera, siempre de Apopa. El lunes a mediodía terminó su turno en el puesto policial situado en la colonia Los Conacastes, y salió rumbo a su casa, pero nunca llegó.
Sin tener certeza de dónde fue cobardemente asesinado, varios policías recorrieron ayer la ribera del río Tomayate para ver si encontraban el cuerpo pero no hallaron nada.
Sus compañeros se mostraron conmocionados con el hecho, no solo por la forma en que le segaron la vida, sino porque dijeron que era un buen policía y compañero.
Con Olaizola ya suman 52 policías asesinados por pandilleros en lo que va del año.
El número de agentes que han muerto a manos de grupos delincuenciales ya sobrepasó la cifra con la que cerró el 2014, cuando hubo 39 bajas.
El sargento fue ultimado cinco días después de que Santos Fernando Montoya, un agente destacado en la Unidad de Mantenimiento del Orden (UMO) fuera asesinado en San Rafael Cedros, Cuscatlán. Montoya, quien tenía 20 años de trabajar en la institución, también fue atacado mientras estaba de licencia.
Matan a dos supuestos pandilleros
Dos hombres que presuntamente eran integrantes de la mara Salvatrucha fueron ultimados ayer en la colonia La Fortaleza, del cantón Las Dispensas, de San José Villanueva, La Libertad.
Las autoridades los identificaron como Milton Ricardo Ramos, de 23 años, y Carlos Víctor Carbajal, de 20.
Las primeras averiguaciones apuntan a que los supuestos delincuentes caminaban por la calle principal del cantón cuando unos miembros de la pandilla 18 los mataron.
Por la tarde fue ultimado a balazos el propietario de una funeraria en el caserío Las Víboras, del cantón Buena Vista, en Aguilares.
El señor tenía un año de haber abierto una sucursal en el municipio y se presume que lo estaban extorsionando.