LA UNIÓN. Los pobladores del caserío Barrancones del cantón Piedras Blancas, en la jurisdicción de Pasaquina, están preocupados por el aparecimiento de una gran cantidad de mariscos muertos en el río Goascorán y el manglar.
Por ello solicitaron a las autoridades del Ministerio del Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) una investigación para determinar qué fue lo que provocó la mortandad de especies.
Los vecinos aseguran que el afluente experimentó una crecida en la presente semana y que luego de eso comenzaron a aparecer chacalines, camarones y peces muertos.
“Fue en horas de la mañana, en toda la orilla del río se veía bastante peces muertos y alguna gente así los agarró para comérselos, otros tuvieron miedo a que estuvieran envenenados”, aseguró Reyes Cabrera, residente de la zona.
Algunos pobladores creen que la muerte de las especies de río y marinas que aparecieron en el lugar se debe a contaminantes que bajaron desde algún río de la zona hasta el Goascorán y la zona del manglar en Barrancones.
Gregorio Cruz, otro vecino, dijo que “hasta camarones venían muertos solo fue una crecentada que los arrastró, en años anteriores hubo algo similar”.
No precisaron cantidades, pero aseguraron fue grande.
El MARN
Sobre el tema, Enrique Barraza, jefe de Humedales del MARN, confirmó que los guarda recursos con presencia en la bahía de La Unión, atendieron una denuncia sobre peces y camarones muertos.
Agregó que “aparecieron peces estuarinos muertos, peces erizos, anguilas, sapos, bagres flotando en la zona del estuario-manglar, reflejando que algún contaminante llegó al estuario mediante un canal de manglar o río”.
En informe, tras la inspección realizada en la zona, el MARN detalla que observaron peces y camarones de agua dulce flotando en el área del manglar, reflejando que la corriente de un canal de manglar o río arrastró algún contaminante, aunque descartan el uso de pesticidas para la captura ilegal de peces o camarones.
Según el informe proporcionado por los guarda recursos, la población local se alimentó de los camarones sin reportarse intoxicaciones, con lo que descartan que se trató de pesticida derramado a algún río confluyente con el área.
El MARN determina que ocurrió una fuerte lluvia que arrastró sedimientos acumulado (por la escasa lluvia en la zona), por algún río y que causó la mortandad de peces que circulan en la zona superior del río.
Según la explicación técnica, el sedimento tapó las branquias de los peces y, al mismo tiempo, redujo a niveles mínimos el oxígeno disuelto en el agua, causando la muerte a los organismos acuáticos afectados por el sedimento.