Las instalaciones de la Asociación Cafetalera de El Salvador (Acafesal) fueron intervenidas ayer por la Fiscalía y la Policía, luego de que el presidente de la entidad, Sergio Ticas, denunció que varios agremiados “se la tomaron ilegalmente”.
Según Ticas, el 24 de agosto acudió al Ministerio Público a denunciar por allanamiento del lugar de trabajo, falsedad ideológica y daños agravados contra un grupo de socios.
El dirigente señala a Omar Flores, Byron Larrazábal y Raúl Zaldaña de haber reestructurado la junta directiva de la gremial con el objetivo de controlarla.
El primero es hermano del viceministro de Agricultura, Hugo Flores, y el segundo es socio y exasesor del expresidente de la Asamblea Legislativa, Sigfrido Reyes.
Tras la denuncia de Ticas, las autoridades llegaron ayer a realizar la diligencia en el local, situado en la colonia Escalón. Al terminar, se retiraron sin dar declaraciones.
Según la denuncia, semanas atrás, varios agremiados encabezados por Edilberto Guevara (quien es primer vocal de la Acafesal) forzaron y cambiaron la cerradura de la puerta principal del establecimiento y de la oficina del presidente para asumir el control administrativo de la entidad.
A decir de Ticas, el conflicto empezó en junio, luego de unas elecciones en las que él fue electo de nuevo como presidente de la gremial.
Cuando presentó su solicitud al Ministerio de Gobernación para obtener las credenciales se enteró que Zaldaña y Larrazábal ya las habían pedido, pese a que ninguno de ellos participó en la elección.
Una semana después, Omar Flores también solicitó las credenciales como presidente, aduciendo que habían irregularidades en el conteo de votos. El día de las elecciones él quedó en segundo lugar en la contienda.
Ticas asegura que mientras Gobernación no entregue las credenciales él debe continuar al frente de Acafesal.
El delegado de la gremial, secundado por otros caficultores, consideran que hay intenciones políticas atrás de estas acciones, especialmente por las personas que están involucradas.