AHUACHAPÁN. El alcalde de Ahuachapán, Abilio Flores, informó ayer que entre 2008 y abril de 2015 fueron depositadas a cielo abierto cerca de 50 mil toneladas de basura en lo que se conoce como barranca El Chanal, que está en las proximidades del cementerio general y la lotificación Valdivieso.
Residentes de este último lugar se quejaron de los malos olores que los desechos producen, sobre todo, por las tardes, noches y cuando llueve; fue por ello que la comuna decidió cerrar el botadero desde mayo pasado, dijo el edil.
El lugar contiene materiales en descomposición y genera gases tóxicos y lixiviados.
El alcalde indicó que iniciaron las indagaciones luego que también se quejaron los residentes en las comunidades La Gloria y Los Claveles.
En el país se prohíbe por ley este tipo de prácticas desde septiembre de 2007. El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), incluso, ya ha impuesto sanciones económicas a algunas alcaldías por ese tipo de acciones contaminantes.
Sin hacer señalamientos directos de supuestos responsables, Flores señaló que los registros municipales consignan que se trasladaba a un relleno sanitario para su tratamiento menor cantidad de desechos de los que producía la cabecera departamental.
Ejemplificó que en 2014 se produjeron 8 mil 946 toneladas de desechos sólidos; pero que a la empresa solo fueron llevadas 2 mil 136.96 toneladas.
También criticó que desde 2008 hasta este año, antes de iniciar su administración, la cantidad de desechos producidos, de acuerdo con las entregas al relleno, experimentaron una disminución cuando la población ha ido en aumento, lo que supone una mayor generación de basura.
La actual administración ha entregado un promedio de 750 toneladas al mes, mientras que entre marzo y abril fueron 420, explicó.
“Tenemos el problema de los basureros clandestinos a cielo abierto. Es aquí donde se destapa la incógnita, porque ha bajado de 2008 a 2014 esas entregas de basura”, dijo en referencia a que la diferencia fue depositada en la barranca.
Buscará apoyo
Flores notificará la situación al MARN para que se involucre en el problema, e invitó a los afectados directos a interponer la denuncia ante las instancias correspondientes.
La alcaldía formó una comisión para determinar cómo resolverán la contaminación del medio ambiente provocada por el botadero a cielo abierto en la barranca El Chanal, aunque el edil explicó que requerirán de apoyo de otras instituciones.
Extraer la basura es un proceso complicado porque está a más de 75 metros de profundidad, aclaró.
Exedil se defiende
El exalcalde Rafael Morán Orellana afirmó que tras la prohibición de lanzar la basura a cielo abierto, gestionó el cierre técnico del botadero, pero a la altura del rastro municipal.
Añadió que en un periodo de 100 años también se utilizó la zona cercana al cementerio como basurero, provocando que se acumulara una gran cantidad de desechos, ya que ese sitio no fue cerrado.
Otro de los problemas, dijo, es que las aguas negras y lluvias van a parar a esta barranca, por lo que no descartó que los desechos que son arrastrados sea parte de lo que se ha denunciado.
Morán añadió que las comunidades vecinas son las que lanzan sus desechos a este punto.
También descartó que llevaran al relleno sanitario menos basura de las que se producía, ya que “lo que hacían era una separación de los productos reciclables”, concluyó.