Registran reducción de droga en furgones

La ventaja marítima y los sistemas modernos de detección en fronteras podrían haber modificado las rutas de envío

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Según la Policía Nacional Civil, las pandillas acuden a pasos ciegos como en Arcatao y San Fernando, Chalatenango, para abastecerse de marihuana y vender al menudeo en colonias.

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2015-06-28 8:00:00

Coincidencia o no en esta recomposición del narcotráfico y su relación con las pandillas, pero las autoridades salvadoreñas han registrado una considerable disminución de furgones o contenedores con droga en cualquiera de las rutas terrestres del país.

“Una cosa curiosa ha sucedido en el país este año. No hemos encontrado cargamento de droga en camiones ni el año pasado, sobre todo en las rutas de la frontera El Amatillo, en La Unión”, afirmó el jefe de la División Antinarcótica de la Policía, Marco Tulio Lima.

El subcomisionado Lima afirmó que la considerable reducción de decomiso de drogas en furgones podría deberse a las nuevas rutas marítimas que los narcos están empleando.

No descartan también que se deba a que el país adoptó tecnología no inclusiva como escáner, rayos X y otras técnicas que han mejorado los niveles de seguridad en las fronteras, lo que de alguna manera ha hecho que los narcos no se arriesguen.

Uno de los últimos decomisos de cocaína en el país fue el registrado en julio de 2013, cerca de la aduana de San Bartolo, Ilopango, donde las autoridades descubrieron 460 kilos de cocaína en un furgón que procedía de Costa Rica.

El ilícito fue descubierto al revisar una cubetas que contenían pulpa de piña, la investigación determinó que 400 cubetas que transportaba el furgón en 12 habían escondido la droga.

El furgón había pasado todos los controles de Costa Rica, Nicaragua, Honduras y El Salvador, y fue detectado cerca de San Salvador.

Poco después, las autoridades descubrieron otro alijo de 178 kilos de cocaína, valorados en 4.5 millones de dólares en un furgón procedente de Nicaragua, el cual había sido abandonado poco antes de pasar el control aduanal de El Salvador. La droga fue detectada en siete trozos pintados de café que simulaban ser de madera, cada uno tenía 13 kilogramos de cocaína y estaban en la parte de abajo del furgón.

El vehículo hacía fila junto a otras rastras, pero cuando el conductor se percató del control con perros antidrogas que desarrollaba la Policía en aduanas salvadoreña escapó. Pareciera que los narcotraficantes agotaron todas las técnicas para llevar las droga vía terrestre, concluyeron las autoridades.