LA UNIÓN. Los pobladores del barrio San Carlos, en la zona del antiguo rastro municipal, aseguran que desde diciembre del año pasado dejó de funcionar normalmente el reloj ubicado en el Monumento a La Madre.
El aparato emite melodías al marcar cada hora.
En 2013, la municipalidad realizó el proyecto de mejoras del monumento, incluyendo el reloj, y el valor total de la obra fue de 30 mil dólares, según el alcalde unionense, Ezequiel Milla.
El funcionario explicó que la máquina trabaja bien y que lo dañado es la caja musical que se activa con un programa computarizado que se ha arruinado por las altas temperaturas que se registran en La Unión.
“Recordemos que en este lugar el salitre y las altas temperaturas tiende a dañar las cosas o proyectos, en este caso es el CPU esta dañado y para eso ya se contrató a la empresa mexicana que lo instaló para que vengan a repararlo”, aseguró el edil.
Milla explicó que, debido a que la empresa que instaló el aparato es mexicana y a que los costos de operatividad son altos, deben esperar que los técnicos visiten la zona a ver otras obras similares y que de esa forma no alga cara la reparación.
Agregó que la obra tenía una fianza de garantía de un año, pero esta terminó, por lo que la comuna tendrá que hacer la inversión para la reparación.
El alcalde aseguró que cuando se hizo el monumento, además de honrar a un ser tan noble como es la madre, se buscó dar un toque diferente a una ciudad que está despertando el interés de los turistas a nivel nacional, e incluso del extranjero, por eso se colocó el reloj musical.
Agregó que la idea de su administración es mantener en buen estado los monumentos y que los unionenses se sientan orgullosos del lugar en el que residen.
Sobre el reloj, Juan Ramón Méndez, habitante del lugar, dijo que desde el año pasado dejó de dar la música el reloj y que “a veces tiene retrasos con la hora real; pero no sabemos en sí que es lo que se dañó”.
Otros residentes en la zona aseguraron que la intención de las autoridades son buenas.
Señalan como ejemplo, además de la edificación del monumento, la construcción de una casa comunal o salón de usos múltiples en el sitio donde antes funcionó el rastro municipal. Milla aseguró que la inversión que hicieron en esa obra fue de 100 mil dólares, en donde hicieron una cancha deportiva.