Más de 200 pacientes con diferentes tipos de cáncer tratados en el hospital nacional Rosales sufren las consecuencias de la falta de una serie de medicamentos para quimioterapia, confirmó ayer el jefe del Servicio de Hematooncología, Héctor Valencia.
Al momento, los médicos tienen problemas para tratar tumores sólidos, leucemia linfoblástica aguda, leucemia mieloide aguda (cáncer en la sangre) y tumores de la médula ósea.
Entre los productos agotados se encuentran etopósido, rituximab, talidomida, paclitaxel, metrotexate, citarabina, mitoxantrona y mercaptopurina, entre otros. Algunos, de acuerdo con Valencia, tienen hasta un año de no tener, otros meses y semanas.
El jefe del Servicio dijo que se trata de productos vitales para los pacientes con cáncer, al menos la mitad de ellos está comprando los medicamentos como puede, el resto recibe la terapia incompleta.
Valencia citó como ejemplo que en el mes pasado tenían citarabina para la leucemia, pero las personas debían comprar la mitoxantrona, estos deben suministrarse combinados para que hagan efecto; pero los que no podían comprarla solo se les aplicaba la citarabina.
Pero a inicios del mes se agotó también la citarabina, eso significa que ese protocolo para la leucemia no se puede aplicar a menos que el afectado adquiera por su cuenta los dos tipos de fármacos.
“Sin esos medicamentos, las leucemias agudas no las podemos tratar, son pacientes que si ellos no tienen el dinero para comprarlo sencillamente no se les puede hacer nada”, comentó Valencia.
En el Servicio de Hematooncología hay personas ingresadas y otras por ingresar , quienes están angustiadas por la falta de los antibióticos que les ayude a superar la enfermedad; algunos la han comprado con sacrificios, otros simplemente no pueden y apelan a las autoridades y a personas altruistas.
A Elio Pérez, de 20 años, le detectaron leucemia y es una de las personas que requiere dos tipos de fármacos para continuar con las quimioterapia.
La familia de Leonila Hernández, quien tiene mieloma, se ha rebuscado para tratar de que la señora no suspenda su tratamiento.
Y los hermanos de José Hernández dicen ya no tener más dinero para comprarle el fármaco, se terminaron los ahorros en exámenes que no estaban disponibles en el Rosales y en el primer ciclo de la quimioterapia.
“Saber que no hay medicamentos cuando uno los necesita, lo que hace es deprimirlo a uno “, expresó Hernández.
Ante la situación que atraviesan, Elio Pérez comentó que “deberían garantizar los tratamientos porque uno que es de escasos recursos es difícil conseguirlos y la salud se deteriora”.
El doctor Valencia expresa su preocupación debido a que han pasado varios meses y los medicamentos no llegan.
Si las personas diagnosticadas con cáncer no reciben el tratamiento completo, los resultados no son los esperados, han dicho los especialistas.
“Si ya de por sí algunos pacientes no responden en esa combinación, mucho menos con un solo medicamento”, agregó Valencia.
Además, añadió que “en cáncer, una vez tenga el diagnostico, entre más pronto tenga el tratamiento es mejor; todas estas limitaciones bajan la calidad de atención”.
Para este tipo de enfermedades al momento, según Valencia, no hay alternativas de tratamiento debido a la escasez que enfrentan.
“Básicamente funcionamos en un sistema donde se les da lo básico y si no existe lo básico no existe otra alternativa”, acotó Valencia.
Un médico del Servicio de Hematooncologia expuso que hay un paciente que requiere un fármaco por cinco días, pero la familia solo ha logrado conseguir para un día, pero quedaría descubierto cuatro días.
“Hay una paciente que ingresó para un esquema de quimio que ya no va a poder cumplir porque se acabó otro medicamento”, manifestó otro de los doctores.
La falta de medicamentos oncológicos es un problema crónico en el Rosales, por años, y con frecuencia, los pacientes denuncian el desabastecimiento y la suspensión de la quimioterapia.
Ayer se consultó a la Unidad de Relaciones Públicas del Rosales sobre la problemática y quedaron de enviar un reporte pero al cierre de la nota no había sido recibido.