Hace dos semanas Jennifer fue operada de la vesícula y tras presentar complicaciones decide ir a la unidad médica del ISSS de la colonia Zacamil, en horas de la tarde. Durante un tiempo estuvo intercambiando mensajes vía teléfono con sus familiares.
A las 7:30 p.m. se comunicó con su esposo y le informa que ya había salido de la consulta y que abordaría un taxi para llegar a su lugar de residencia en los alrededores de Mejicanos.
Después de transcurrido un tiempo, sus familiares llamaron a su teléfono celular y ya estaba apagado, a las 11: 29 p.m. el esposo de Jennifer recibe un mensaje vía WhatsApp que decía: ” sigo en el hospital”, el cual se sospecha no fue escrito por ella.
Angélica Portillo, tía de Jennifer, asegura que se ha recorrido ya los hospitales, incluso se habló con el médico que la atendió quien dijo haberla despachado a las 7:30 p.m.
Jeniffer es estudiante de una universidad privada y madre de una pequeña de 3 meses de edad.
Familiares y amigos han interpuesto una denuncia en la delegación de la PNC de la Zacamil. Hasta este momento se desconoce qué fue lo que sucedió.