La Basílica Nuestra Señora de Guadalupe, conocida como La Ceiba, en Antiguo Cuscatlán , La Libertad, espera recibir a más de 60 mil feligreses, quienes buscan venerar ala Virgen morena en su día y cumplir con la promesa de llegar cada año a su santuario.
El festejo mariano inició ayer y muchos aprovecharon a visitar con su familia el altar de la “Lupita”, como la llaman de cariño.
Los agradecimientos a la Virgen de Guadalupe no cesaron, tanto que a media mañana de ayer más de 2 mil personas la habían venerado.
Juan Pablo Bonilla, encargado de la fila de veneración, contó que “al final del día (ayer) esperamos que vengan unos 30 mil a 40 mil feligreses”. Añadió que prevén que la cifra se duplique para hoy.
Para este año los parroquianos activos de la basílica han destinado a más de mil personas que organizan, ordenan, cuidan y velan para que la celebración sea un éxito.
“Estamos hablando de más de mil personas involucradas en todo el festejo a la Virgen”, detalló Bonilla.
Festejo masivo
Hoy es el propio día en el que el fervor de cientos de católicos queda demostrado. Los trajes de indígenas recordaban con alegría al indio Juan Diego, a quien la Madre de Dios se le apareció en 1531 en el Monte Tepeyac, en México.
Feligreses de los 14 departamentos del país, incluso extranjeros presentan sus agradecimientos.
La familia Ruano Leiva llegó a las 6:00 de la mañana e hicieron la fila de veneración por una hora. Al llegar al altar, donde está la imagen de la Guadalupana, pronunciaron una plegaria de fe, se persignaron y corrieron a la cripta de la basílica, en la cual se realizó la misa de 7:00 de la mañana.
Los Ruano llegaron vestidos de “inditos” y contaron que la “Morenita” le había hecho varios favores, incluso hasta intercedió por su salud.
“Siempre vendremos a visitarla. Ella ha hecho tanto por nosotros”, compartió Lourdes de Ruano.
Calles cerradas
Para los festejos, la basílica ha dispuesto restringir el paso de las calles aledañas.
Una de ellas es el carril donde circulan los buses de las rutas 202, 205, 101-B, 34 y otras.
Dentro de Antiguo Cuscatlán, al final de la calle del Mediterráneo, frente al Instituto Hermanas Somascas, también se encuentra cerrada desde ayer, por lo que los agentes están desviando a los vehículos que transitan por esta arteria y el bulevar La Sultana, por la Calle Antigua Ferrocarril.
Los conductores pueden incorporarse a San Salvador por la calle Las Rosas o la Avenida Walter Thilo Deninger. Rutas de buses como la 44 y 27 están siendo desviadas por estas calles.
Lo ideal es buscar otras rutas para evitar el tráfico pesado de la zona.