Un grupo de entre 40 y 60 miembros de la Pandilla 18, del ala Revolucionaria, ha reactivado un antiguo campamento que fue ocupado por la exguerrilla del FMLN en una zona rural de Tecoluca, departamento de San Vicente, según policías y militares.
Durante el conflicto que se libró entre 1980 y 1992, la guerrilla del FMLN instaló un campamento que era conocido como Las Estacas, en las proximidades del Río Lempa, entre los cantones Guajoyo y El Socorro.
Excombatientes del FMLN, vecinos de Tecoluca, confirmaron la existencia de ese campamento que, desde hace varias semanas, el grupo de pandilleros está utilizando como centro de entrenamiento permanente.
Lugareños aseguraron que han visto desplazamiento de numerosos hombres con armas largas y con uniformes similares al que usan los militares. Llegan a abastecerse de comida a los caseríos más inmediatos al campamento.
Entre tanto, la Policía asegura que, posiblemente, en el campamento hayan varios exmilitares y al menos un expolicía que estarían impartiendo entrenamiento militar al grupo de criminales, incluyendo el manejo de una ametralladora M-60, que ha sido vista en manos de ese grupo.
En intercambios de disparos que se han suscitado en las últimas semanas, la Policía asegura que los pandilleros han utilizado munición, aparentemente nueva, para fusil M-16. Lo mismo han detectado en los recientes decomisos de armas y municiones.
Los lugareños aseguran que en los últimos días de noviembre, aviones, posiblemente de la Fuerza Aérea, han sobrevolando la zona, efectuando operaciones de reconocimiento.
A la supuesta reactivación de ese antiguo campamento se suma también la alta presencia de un grupo de pandilleros, siempre de los 18 revolucionarios, en el cantón El Maneadero, municipio de Zacatecoluca, La Paz.
De acuerdo con la fuentes policiales, el campamento Las Estacas y el cantón El Maneadero están cercanos entre sí, por lo que no descartan que se trate de un mismo grupo.
El pasado 6 de octubre, el agente policial Finicio Orlando Alfaro Sánchez fue asesinado en su casa, por pandilleros que portaban armas largas y vestían uniformes militares y similares a los que usa la policía. De acuerdo con investigaciones, el policía fue asesinado por pandilleros que operan en El Maneadero.