AHUACHAPÁN. Las losas que forman la superficie de rodadura en el puente El Jobo, en la frontera Las Chinamas, Ahuachapán, han comenzado a separarse nuevamente y el micro pavimento que le fue colocado durante la última intervención, a inicio de año, también cedió en muchas de las uniones de estas estructuras de concreto.
La vibración es alta en algunos de los tramos del puente, sobre todo cuando circulan los vehículos.
Estos daños comenzaron a surgir pocas semanas después de que intervinieran la infraestructura, entre enero y abril de este año. Luego que en octubre de 2013, varias de sus losas se quebraran cuando un vehículo cargado de verduras intentó cruzar el puente.
En dichos trabajos, el Gobierno guatemalteco invirtió más de un millón de dólares, mientras que El Salvador, $200,000, de acuerdo con registros periodísticos.
Los daños resurgieron pese a las restricciones que tiene el puente, entre ellas, no pueden pasar vehículos de más de 18 toneladas y la circulación no puede ser a más de diez kilómetros por hora y en un solo sentido.
Del lado salvadoreño, hay personal del Ministerio de Obras Públicas (MOP) verificando el peso de los vehículos, pero en el guatemalteco, no siempre hay alguna autoridad dando fe de que se cumplan las restricciones.
Los usuarios exigieron a las entidades correspondientes que realicen trabajos de calidad en el sitio porque temen que suceda una desgracia.
El MOP informó que el 24 de octubre pasado hubo una reunión binacional con técnicos de la Dirección General de Caminos de Guatemala, para discutir el documento que servirá para el mantenimiento del puente. Este debe ser aprobado por ambos países para que se implemente en 2015, aunque no hay una fecha exacta.
La dependencia gubernamental salvadoreña también consignó, hace unos días, que la infraestructura será sustituida por Guatemala. Sin embargo, no establece fechas ni montos.
A diario circulan, en promedio, 5 mil vehículos, entre ellos, más de una treintena de buses internacionales, y 175 camiones con mercadería y vacíos.
La cantidad de automotores aumenta considerablemente en algunas temporadas, como la del fin de año, que está cerca.