En un nuevo intento de las autoridades por frenar los homicidios y extorsiones ordenadas desde las cárceles, el Ministerio de Justicia y Seguridad Pública, y la Superintendencia General de Electricidad y Telecomunicaciones (Siget), firmaron ayer un convenio para incrementar la instalación de bloqueadores de señal de celular e Internet.
Con la instalación de nuevas tecnologías, las autoridades se proponen reducir las posibilidades de que los presos desde el interior de las cárceles vía teléfono celular e Internet ordenen hechos delictivos.
En la administración anterior, el Ministerio de Justicia y las telefónicas firmaron un protocolo de entendimiento con el que se allanó el camino para la instalación de bloqueadores en el 50 por ciento de los penales del país.
Aunque el ministro de Justicia, Benito Lara afirmó que el nivel de efectividad del sistema de bloqueo es del 80 por ciento, la población opina lo contrario y atribuyen la reducción de denuncias a las amenazas de los extorsionistas y a los pocos resultados de la Policía por combatirlos.
A nivel nacional hay 19 centros penitenciarios con bloqueadores, en la mayoría con presencia de pandilleros.
La superintendenta, Blanca Coto, afirmó que por seguridad no podían revelar en qué medida se disminuiría la recepción de señal celular en los diversos centros penales.
Sin embargo, aclararon que el bloqueo en las prisiones no afectará a la población circunvecina de éstos.
“Lo que queremos es dar un combate efectivo a la delincuencia, pero también contribuir en las labores de prevención de la misma”, puntualizó Coto. En ese sentido afirmó que se apoyarán de otros avances tecnológicos que ayuden a conseguir el mismo fin.
El ministro Lara afirmó que, pese los inconvenientes de disponibilidad de equipo técnico de bloqueo, en la medida que avance el proceso de instalación de más artefactos en los presidios, la población empezará a percibir menos amenazas o extorsiones vía celular.
Lara manifestó de que en algunos penales, grupos de reos ofrecen fuertes sumas de dinero a funcionarios, con tal de que desconecten las fuentes eléctricas que mantienen activo los sistemas de interrupción de llamadas telefónicas.