AHUACHAPÁN. El Viceministerio de Transporte (VMT) cerró el área de espera de los buses exclusivos de la ruta 202 en Ahuachapán, bajo el argumento de que no reúne las condiciones necesarias; pero sobre todo porque la empresa propietaria de las unidades había puesto a operar más vehículos de los permitidos y cobraba una tarifa no autorizada.
Esta ruta opera de Ahuachapán hacia San Salvador, y viceversa, y tenía el área de espera en la colonia Santa María, a la entrada de la ciudad.
La decisión del VMT ha causado malestar entre ahuachapanecos y la municipalidad, pues algunos de estos buses regresaron a instalar su punto de abordaje en la calle, tal como el resto del transporte colectivo interdepartamental y urbano, ante la falta de un permiso de operación de la nueva terminal, que inició su construcción en 2012.
Las personas aseguraron que con esta decisión del VMT, aumenta el desorden que ese sector provoca al final de la 10a. Calle Oriente, donde se estacionan a la espera de pasajeros.
El jefe regional del VMT, Gilberto Delgado, explicó que los buses son propiedad de la Asociación de Transportistas Ahuachapanecos (Asotra) y que fueron empresarios que no están agremiados a estos los que se quejaron por competencia desleal.
El funcionario explicó que la empresa sólo tiene autorización para cuatro unidades catalogadas como exclusivas. Sin embargo, habían puesto a circular adicionalmente otras ocho unidades que no tienen aval por parte del VMT.
A eso se suma que la tarifa autorizada para esos buses era de $1.60 pero ellos cobraban $2.30.
“La suma de todo eso nos está llevando a tomar decisiones de ese tipo”, manifestó Delgado.
Pese a la ilegalidad que cometieron los empresarios, no habrá sanciones dijo el jefe regional. Agregó que tanto los empresarios de Asotra como los cuatro representantes de otras unidades independientes de la misma ruta, acordaron el cierre del área de espera con el fin de tener un mejor control por parte del VMT.
Delgado agregó que lo que buscan es evitar accidentes de tránsito en casos de peleas por ganar pasajeros. Sólo en esta ruta hay autorizados 124 unidades, reconoció.
El presidente de Asotra, Ismael Zambrano, lamentó la decisión de la dependencia gubernamental, al señalar que los pasajeros de dichas unidades tenían condiciones adecuadas y seguras mientras esperaban abordar sus unidades en Ahuachapán. En San Salvador salen desde la terminal de occidente.
Además, aclaró que la inversión para la adquisición de estos buses ha sido grande pues cada unidad está valorada en cerca de $200 mil.
Sobre el cobro dijo que es de $1.60, tarifa que aplican desde 2005, cuando comenzó a operar dicho servicio.
Zambrano expresó que gestionarán el permiso ante el VMT para que les autorice abrir la sala de espera.
El regidor de la alcaldía de Ahuachapán, Rómmel Jiménez, expresó que con el cierre de dicha área se está contribuyendo al desorden de la ciudad por la cantidad de buses en las calles.
“Desde el momento que se opuso a que los buses pasaran al local nuevo creo que desde ese momento lo que quiere es desorden”, enfatizó el regidor en referencia a que el VMT tampoco ha avalado el funcionamiento de una terminal privada que fue construida por los mismos transportistas.
Sin embargo, Delgado expresó que son las mismas unidades las que generan el desorden.