A los pandilleros que atacaron a Nancy Beatriz Martínez López, de 18 años, no les importó que ella estuviera amamantando a su hijo de tres meses de nacido, para descargarle una ráfaga de disparos que le quitaron la vida de inmediato. Su bebé cayó al suelo sufriendo una lesión en el bracito derecho.
El ataque se produjo el martes pasado por la noche, en la calle principal del barrio Morazán, en las cercanías del cementerio de Cuyultitán, La Paz.
El informe policial detalla que la joven se dirigía hacia su casa y de repente le salieron al paso varios pandilleros quienes de inmediato le dispararon.
A la víctima le contabilizaron ocho lesiones de bala en su cuerpo, según la Policía.
Una de las hipótesis que maneja la Policía de Zacatecoluca es que la joven, quien vivía en una zona asediada por la mara Salvatrucha (MS), habría tenido una relación sentimental con un pandillero del lugar, y luego tuvo otra con un marero de la pandilla rival.
También la Policía investiga la versión de que el ataque habría ocurrido por supuestas disputas en venta de drogas en el sector, aunque esta hipótesis no está bien sustentada, según fuentes policiales.
El bebé de tres meses se convierte en el cuarto niño que resulta herido de bala, en ataques armados en contra de sus familiares, registrados en las últimas tres semanas.
Niño fuera de peligro
El bebé se encuentra ingresado en el Servicio de Ortopedia del hospital Benjamín Bloom, en San Salvador, su condición de salud es estable y ya está fuera de peligro, según fuentes hospitalarias.
El jefe de la División de Cirugías del referido hospital Luis Enrique Meléndez, explicó que la bala le atravesó su pequeño brazo, lo que “le había producido una fractura conminutada del tercio medio del húmero derecho (hueso) sin compromiso vascular, ni compromiso nervioso, y en estos momentos el niño esta estable”, explicó Meléndez.
El jefe de la División de Cirugías del hospital sostuvo que inmediatamente después de que el niño ingresó, le hicieron el lavado quirúrgico de la herida y la inmovilización externa de la fractura.
Meléndez agregó que el niño “tiene todas las probabilidades de recuperarse sin ninguna secuela, porque el hueso se reconstruye y se remoldea”.
“Quizá la complicación inicial que pueda haber por ser una fractura expuesta, sea que a pesar del tratamiento quirúrgico que se le hace y la cobertura con antibióticos, pudiese desarrollar una infección a largo plazo, pero esperamos que no suceda eso”, añadió.
Aumentan niños heridos en hechos de violencia
El director del hospital Bloom, Hugo Salgado, reveló ayer que han aumentado la cantidad de niños que han sido atendidos en ese centro por haber resultado lesionados de bala en ataques armados registrados en el transcurso de este año.
Salgado explicó que en lo que va del año se atendieron a 12 menores con heridas de bala, mientras que el año pasado les habían dado asistencia médica a siete menores.
Además, un niño que murió mientras recibía atención médica por las graves lesiones de bala que recibió.
Salgado sostuvo que el tratamiento médico para cada niño con lesiones de bala, que ingresa a la Unidad de Cuidados Intensivos, asciende a unos 1,500 dólares diarios.
Esto último sin contar el costo del uso de los quirófanos y el tipo de operación quirúrgica que se les tiene que realizar a los pequeños.