Las fiscalías de las Bahamas y Costa Rica enviaron a su homóloga de El Salvador información de cuentas bancarias del expresidente salvadoreño Francisco Flores, acusado de corrupción, informó hoy una fuente judicial.
El presidente interino de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), Florentín Meléndez, dijo a periodistas que este órgano envió recientemente a la Fiscalía General de la República (FGR) “información que ha venido de las Bahamas y de Costa Rica” sobre cuentas bancarias de Flores en esos países.
A petición de la FGR, la CSJ aprobó el 13 de febrero pasado pedir esa información bancaria de Flores en las Bahamas, Costa Rica y Estados Unidos, ya que este trámite le compete al órgano judicial, según la legislación local.
Meléndez explicó que los reportes de las Bahamas y Costa Rica llegaron por “vía diplomática” a la CSJ, que “en cuestión de horas” los trasladó a la Fiscalía, aunque no precisó fechas.
El magistrado reiteró que la CSJ no ha recibido del juzgado correspondiente una solicitud para tramitar la extradición de Flores desde Panamá, que la FGR presentó el pasado día 14.
Las decisiones sobre extradición en El Salvador le corresponden a la CSJ, y “así como hacemos en otros casos”, en el de Flores “vamos a actuar con la rapidez que el caso amerita”, aseveró.
El ministro salvadoreño de Justicia y Seguridad Pública, Ricardo Perdomo, dijo hoy que la oficina de la Policía Internacional (Interpol) ha pedido a las autoridades salvadoreñas la orden de extradición de Flores.
La supuesta presencia de Flores en Panamá, protegido por la expresidenta de ese país, Mireya Moscoso, ha sido denunciada por el presidente del Parlamento salvadoreño, Sigfrido Reyes, y el político opositor panameño Mitchell Doens.
Flores está prófugo desde el pasado 6 de mayo, cuando la jueza Marta Rosales, del Juzgado Primero de Paz de San Salvador, ordenó su captura, le embargó sus bienes y cuentas bancarias, y elevó el caso al Juzgado Primero de Instrucción.
La Fiscalía acusó a Flores el 30 de abril de peculado y enriquecimiento ilícito por un total de 15 millones de dólares en ayuda de Taiwán a su Gobierno (1999-2004) y por desobediencia por no comparecer de nuevo ante una comisión investigadora de la Asamblea Legislativa el 30 de enero.
Tres días después de que el tribunal salvadoreño ordenara su captura, la Interpol incorporó a Flores en la lista de los más buscados.