Con los primeros nombramientos, el futuro Gabinete de Gobierno del presidente electo Salvador Sánchez Cerén se perfila de continuidad; sin embargo, aún faltan carteras del Estado clave para determinar cuál será el estilo de gobierno para los próximos cinco años, de acuerdo con varios analistas.
Estas proyecciones son basadas en que aún falta determinar quiénes dirigirán las carteras de Seguridad, Salud y Educación, pese a que los analistas ven algunos signos que consideran tan positivos como difícil de interpretar para la tendencia que seguirá el Gobierno del FMLN.
Para el observador político Joaquín Samayoa, es prematuro sacar conclusiones al respecto, aun con los nombramientos que ya fueron anunciados por el presidente electo vinculados más a la idea de que se continuará con el perfil similar al de los funcionarios del Gobierno del presidente saliente Mauricio Funes.
“Los pocos cargos que se han anunciado, obviamente, tienen un peso fuerte de continuidad, no hay para donde hacerse. Lo que pasa es que no creo que de allí se pueda sacar una conclusión respecto de orientaciones o rumbos porque en eso creo yo que habrá continuidad en unas y en otras probablemente no la haya”, consideró.
Para el director la Fundación Nacional para el Desarrollo (Funde), Roberto Rubio, lo que se dibuja hasta el momento es una combinación de perfiles, aunque ya se escogieron puestos fundamentales en manos de la Comisión Política del FMLN.
Para el analista, hay una combinación entre la continuidad de cuadros dentro y fuera del partido que han generado “confianza”, y por otro lado puestos como el del diputado Roberto Lorenzana, en la Secretaría Técnica de la Presidencia, y el de Manuel Melgar, como Secretario Privado.
A su juicio, el anuncio de la continuidad de Gerson Martínez en la cartera de Obras Públicas, José Napoleón Duarte en el Ministerio de Turismo y Carlos Cáceres en el Ministerio de Hacienda son esenciales para demostrar confianza.
Su pronóstico es que el ministerio de Seguridad, la Policía Nacional Civil, el Organismo de Inteligencia del Estado y el Ministerio de Gobernación caigan en manos de personas más identificadas con el partido de gobierno.
“Yo diría que los puestos económicos, hasta ahorita, son de continuidad. Habrá que ver puestos más políticos quizá como Seguridad, como Gobernación. Allí tengo la impresión de que puede haber más gente de partido, más vinculada a la comisión política”, subrayó.
En ese sentido, Rubio afirmó que es imposible tener una buena gestión gubernamental si hay “conjunción” entre gobierno y partido.
“Se debe evitar que en las instituciones, donde puede haber gente de partido, no se responda a los lineamientos de la Comisión Política”, consideró.
Combate de delincuencia
El abogado y analista Francisco Bertrand Galindo, al considerar que los cuadros que sean nombrados en los puestos más “críticos” como el de ministro de Seguridad deben ser personas sin enfoque ideológico.
“Los que sean del partido en sí no es del todo malo, pueden ser más bien los perfiles de dentro del partido los que puedan llegar, y si es gente con enfoque pragmático van a manejar el tema de seguridad más apegado a la realidad. Pero si es gente más radical va a ser más apegado a la politización de la seguridad”, dijo el abogado.
Sánchez Cerén, quien asumirá la Presidencia el 1 de junio próximo, confesó en recientes declaraciones a periodistas que le preocupa que la población le exigirá eficacia en el combate de la delincuencia, para lo cual necesita un buen ministro de Seguridad.
“Uno de los principales resultados que yo voy a tener que demostrar es el de disminución de las extorsiones, la disminución del crimen”, admitió el presidente electo.
Por tanto, escoger al ministro de Seguridad “es un tema que requiere pensarlo bien, analizarlo bien; yo no me puedo apresurar”, respondió el mandatario electo a periodistas que insistían en saber quién ocupará ese cargo.
“Tengo que tomarme todo el tiempo que sea posible; eso tengo que anunciarlo a partir del 1 de junio”, enfatizó.
Para Seguridad, está buscando a “la persona más idónea”, que “garantice aplicar la visión mía” de enfrentar la violencia con “dos manos inteligentes”, una de ellas “la firmeza del Estado a través de la represión”, planteó el presidente electo.
La otra “mano inteligente”, contrapuesta a la “mano dura” de gobiernos anteriores, es la tarea preventiva y la generación de “mejores condiciones de vida para la familia”, dijo.
Agregó que otros requisitos del próximo ministro de Seguridad son que “sea una persona eficaz”, que “conozca a profundidad el tema” y que “tenga propuestas, iniciativa para resolver ese asunto” de la inseguridad.
Finanzas
Por su parte, el analista Paolo Lüers es de la idea que en carteras como Hacienda no se ha pensado en gente del partido, como la presidenta de la comisión de Hacienda de la Asamblea, Lorena Peña, cuyo nombre sonó como posible opción para el cargo, pero cree que la permanencia de Cáceres tampoco es una señal positiva.
En el caso del nombramiento de Roberto Lorenzana, aseguró que el legislador farabundista tiene más un perfil de “comisario político” que de Secretario Técnico.
Para Lüers, el nombramiento de Lorenzana es más un “forcejeo interno” en vista de que en un principio se consideró a Gerson Martínez en ese puesto, por lo que habría un predominio del las Fuerza Populares de Liberación (FPL), uno de los grupos guerrilleros que integraron el FMLN en los 80.
Además de Salvador Sánchez Cerén y Óscar Ortiz, el vicepresidente electo, se incluyen en las FPL al también recién nombrado Canciller, Hugo Martínez, y al Secretario del Diálogo Político, Económico y Social, Hato Hasbún.
En tanto, el nombramiento como Ministro de Economía del empresario Tharsis Salomón López es un punto que para Samayoa, contrario a Lüers, genera una señal positiva y de estabilidad.
“Tharsis es un buen signo de un funcionario nuevo y un funcionario que ciertamente tiene conocimiento del sector productivo y del sector privado, lo veo como un signo positivo”, consideró Samayoa.
Por el contrario, Lüers advierte que esa figura no tendrá mayor incidencia entre el empresariado nacional. “Para el sector privado es más fácil negociar directamente con la gente del FMLN que con un intermediario que no es ni chicha ni limonada”, consideró el analista político.
Asimismo, agregó que el presidente electo está lanzando poco a poco los nombres de los futuros funcionarios para generar expectación.
Algo que advierte Samayoa es que, aunque algunos nombramientos generan estabilidad, debe considerarse agregar nombres nuevos dentro del gabinete. “Sí sería bueno que haya un cambio. No es bueno que la misma gente esté en el gobierno tanto tiempo. Esperaría en los nuevos anuncios ver gente nueva”, dijo el analista.