Mareros matan a dos vigilantes del mercado Central

En uno de los ataques también murió empleado municipal que cobraba impuestos a vendedores del establecimiento

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El empleado municipal y el vigilante fueron asesinados en la colonia Ferrocarril, donde los delincuentes se disputan el control de la venta de drogas y extorsión. Foto EDH / Jaime Anaya

Por Mauricio Pineda Lucinda Quintanilla Diana Escalante sucesos@eldiariodehoy.com

2014-04-26 8:00:00

Un mes después de que un vigilante privado que trabajaba en el mercado Central de San Salvador matara, en defensa propia, a dos pandilleros que pretendían asesinarlo, ayer fueron ultimados a balazos, en San Salvador y San Marcos, dos guardias de seguridad de dicho mercado y un empleado de la alcaldía capitalina.

En el primer hecho perdieron la vida Víctor Alberto Velasco, de 55 años, quien cobraba los impuestos a los comerciantes del centro de abastos, y Miguel Ángel González, de 50, vigilante de la zona.

Un compañero de este último resultó herido tras haber sido alcanzado por no menos de cuatro balas. Hasta el cierre de esta nota, se desconocía cuál era su estado de salud.

La Policía atribuyó el atentado, cometido a las 4:30 de la madrugada, a integrantes de la mara Salvatrucha.

Según testigos, los pandilleros les dispararon a las víctimas con un fusil M-16 y un arma calibre 9 milímetros, desde un vehículo en marcha.

El ataque fue cometido entre la 11a. Avenida Norte y el pasaje Angulo, de la colonia Ferrocarril, a una cuadra y media del Pabellón 10 del mercado Central. Esa es la misma dirección donde hace un mes otro vigilante frustró un ataque en su contra y mató a dos pandilleros.

La Policía informó que Velasco, el empleado municipal, tenía más de 34 años de trabajar en la zona y habría sido una víctima circunstancial, porque aparentemente caminaba rumbo a su lugar de trabajo cuando fue la balacera.

Dos horas después del doble homicidio, otro vigilante que también laboraba en un negocio situado cerca del mercado Central fue acribillado en San Marcos, en el kilómetro 11 de la autopista que del aeropuerto internacional conduce a San Salvador.

La víctima, identificada como Francisco Bonilla Martínez, de 45 años, fue asesinado a balazos mientras esperaba el autobús que lo llevaría hacia su lugar de trabajo.

Según la Policía, los atacantes huyeron hacia la colonia Linda Vista, que es asediada por la mara Salvatrucha.

Aunque en ambos casos los delincuentes pertenecían a la misma pandilla, las autoridades no quisieron señalar si los ataques están relacionados.

Los parientes de Bonilla manifestaron que tenía más de una década de trabajar como agente de seguridad y que tenía tres hijos, dos de ellos menores de edad.

Fuentes policiales señalaron que el principal móvil de los atentados que han sufrido en los últimos meses los vigilantes de la zona del mercado Central es porque ellos son contratados por los vendedores para que les den seguridad ante el constante acecho de los mareros.

En ese sector, los grupos delincuenciales también se disputan el territorio para comercializar drogas y cobrar extorsiones.

El pasado jueves, otro vigilante privado que daba seguridad a vendedores informales cerca del parque Bolívar, en la 4a. Calle Poniente, también fue ultimado por varios mareros.

Agentes policiales dijeron que unos pandilleros lo habrían matado porque les obstaculizaba en sus acciones delictivas y después le robaron el arma de equipo.

Asesinan a cobrador

Robin Gabriel Portillo, de 24 años, cobrador de la Ruta 363, que hace su recorrido entre Santa Elena y Puerto El Triunfo, en Usulután, fue ultimado a balazos mientras él y el motorista hacían el primer viaje del día, cuando circulaban en el kilómetro 109 de la carretera hacia Puerto El Triunfo, en la zona conocida como El Chuquín.

Las autoridades informaron que el chofer de la unidad se libró de morir al escapar de los delincuentes. Horas más tarde, se registró otro asesinato en el cantón Tierra Blanca, del municipio de Jiquilisco, siempre en Usulután.

La Fuerza Naval recuperó el cadáver de un hombre que flotaba en el golfo de Fonseca, en La Unión.

El cadáver estaba dentro de una bolsa, tenía los pies amarrados y en el cuello una soga. El cuerpo estaba en avanzado estado de descomposición.

En otro hecho, en el bulevar Diego de Holguín, en Santa Tecla, fue asesinado un hombre de unos 30 años, que supuestamente era pandillero.

El hombre fue atacado con un cuchillo hallado en la escena. El cadáver quedó a media calle, por lo que algunos carros le pasaron encima.

Matan a militar retirado

Un hombre que al parecer se dedicaba a prestar dinero y era militar retirado fue encontrado muerto dentro de su vivienda, en la residencial Claudia, situada en la 75a. Avenida Norte, en la colonia Escalón.

Las autoridades informaron que la víctima era Clemente Guevara Alas, de 52 años, y presentaba lesiones provocadas con arma blanca.

Lo poco que se sabe es que el hallazgo del cadáver lo hizo una empleada de Guevara. Los agentes de la Policía que llegaron a la escena no precisaron a qué hora fue cometido el asesinato ni quiénes serían los sospechosos.

Por la tarde, hubo un enfrentamiento entre integrantes de la mara Salvatrucha y militares que patrullaban la lotificación Los Naranjos, en Tonacatepeque. No hubo víctimas en la balacera.

Tres delincuentes, de entre 18 y 22 años, fueron aprehendidos por ese hecho y les decomisaron dos armas de fuego, un cargador y municiones.