Los cadáveres de dos adolescentes fueron encontrados ayer por la mañana en la calle San Luis Portales, de la comunidad Quiñónez, al suroriente de la capital.
La Policía informó que los asesinatos fueron cometidos en horas de la madrugada.
Las víctimas tenían lesiones de bala. Cuando las autoridades fiscales y forenses intentaron hacer los reconocimientos de los cadáveres que ordena la ley, estos no fueron identificados por no tener documentos personales.
El jefe de la unidad que investiga los homicidios de la Fiscalía en San Salvador, Rafael Romero, explicó que uno de los jóvenes fue identificado como David N., de 17 años, por familiares que se presentaron por la tarde.
Agregó que los parientes manifestaron que David salió de su casa la noche del sábado pasado con unos amigos, pero ya no regresó. Este menor residía en el sector de la colonia Santa Marta del barrio San Jacinto de San Salvador.
Romero dijo que los familiares no proporcionaron mayores detalles sobre el menor, aunque se investigará si los jóvenes llegaron a la referida comunidad o si los raptaron en otro lugar y los llevaron a ese sitio.
Los fiscales del caso aseguraron que las víctimas no tenían tatuajes de pandillas en sus cuerpos.
En el lugar del doble homicidio, una zona asediada por una pandilla, los habitantes ni siquiera querían mencionar lo ocurrido. Hasta ayer por la tarde, el otro joven aún no había sido identificado, explicó el fiscal Romero.
En otro caso, la Policía informó del hallazgo del cadáver de un hombre en playa Las Tunas, en La Unión. La Policía investiga la causa de muerte.
También, las autoridades policiales registraron otro asesinato al final de la calle de la colonia Tepeyac, San Rafael Obrajuelo, en Cuscatlán.
Las cifras de la Policía registran 883 asesinatos desde el uno de enero hasta el 10 de marzo, una diferencia de 292 asesinatos más con relación al mismo período de 2013.