Tras sentenciar que “jamás en un Estado responsable se negocia con criminales y terroristas”, el Fiscal General, Luis Martínez, confirmó que investigan pagos que recibieron las pandillas por la tregua y que citará a los funcionarios del gobierno que hayan tenido relación con ese caso.
“En cuanto al pago hacia las pandillas, sí ha sido efectivo, tenemos una fuerte investigación en ese entorno”, dijo Martínez, entrevistado en el programa de opinión nocturno de canal VTV.
El jefe del Ministerio Público basó su afirmación en la detención de uno de los supuestos involucrados. “Capturamos a unas personas que le llevaban dinero en efectivo a un cabecilla pandillero al Centro Penal de Cojutepeque, pero eso es una línea de investigación que estamos desarrollando”, explicó.
Explicó que tienen varias hipótesis sobre el pago recibido por las pandillas en la auto denominada tregua, declarada entre esos grupos a fin de reducir los homicidios a cambio de recibir privilegios en las cárceles, según se ha denunciado. Sin embargo, Martínez dijo que no podía adelantar nada sobre las pesquisas.
No obstante, advirtió que “si hay políticos que han negociado con pandilleros, créanme que no me va a temblar la mano en ejercer las acciones penales respectivas”.
También confirmó que cuatro exfuncionarios de Seguridad y Centros Penales que han llegado a declarar a la Fiscalía sobre las ilegalidades alrededor de la supuesta tregua entre las pandillas aseguraron que hubo pagos también para los mediadores y familiares de los pandilleros.
“Tenemos conocimiento de que se utilizaron las tiendas de los centros penales para ese fin”, dijo Martínez, y agregó que “vamos a pedir la colaboración a la Corte de Cuentas para poner de frente y de cara al país de lo que debió haber sido un pacto o un acuerdo con las pandillas”.
Tregua “es inexistente”
El mismo director de la Policía, Rigoberto Pleités, declaró el lunes que la tregua “se está agotando” y que producto de lo anterior ha aumentado el número de homicidios en un 26 por ciento. “Consideramos que ese pacto entre las pandillas técnicamente ya no existe, debido al incremento de los homicidios en los últimos meses”, reiteró.
Pero el periodista y observador político Paolo Lüers, quien ha seguido de cerca el tema de la tregua, consideró que cuando dicen que la tregua “se está agotando”, ratifican el “fracaso del gobierno en la farsa de querer capitalizar los resultados de la tregua” y que es tras la llegada de los actuales funcionarios de Seguridad que se observa el alza de homicidios (ver entrevista en siguiente página).
La Fiscalía tiene abierta una investigación sobre las ilegalidades que habrían rodeado el supuesto pacto de no agresión entre las pandillas desde marzo de 2012. Ayer mismo los fiscales allanaron las oficinas de la Dirección de Centros Penales en busca de una computadora portátil que supuestamente contiene información sobre el caso (ver nota).
Entre las supuestas irregularidades que se investigan están los privilegios excesivos a los cabecillas de las pandillas en las cárceles, supuestos pagos a los mediadores, colaboradores y familiares de pandilleros; el traslado de jefes de las maras a penales de menor seguridad y las salidas de éstos de las cárceles para dar conferencias de prensa, entre otros.
El jefe del Ministerio Público explicó que las investigaciones de estos hechos están avanzadas y que serán llamados todos los funcionarios del gobierno que hayan tenido algún tipo de protagonismo en “torno al fracasado proyecto de la tregua y vamos a ver si hay algún tipo de cometimiento de infracción penal”.
Fiscal reprocha
Martínez, por su parte, ha sostenido que la tregua entre esos grupos ilegales ha sido “hipócrita”, pero durante la entrevista volvió a cuestionar ese supuesto pacto que se habría derivado de una presunta negociación entre el gobierno y las pandillas, según denunció el partido ARENA en noviembre.
“Jamás en un Estado responsable se negocia con criminales y en este caso hasta con terroristas porque el Gobierno de Estados Unidos los ha calificado como tales”, dijo Martínez. “Es inconcebible que se haya llegado a un nivel de éstos. Nosotros jamás bailamos el ritmo de la tregua porque creemos firmemente en que la paz social debe ser sincera y de frente al país”, enfatizó.
En octubre del año 2012, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos declaró a la mara Salvatrucha (MS) como una “organización criminal transnacional”. Fue la primera pandilla callejera que se equiparó a estructuras criminales como Los Zetas (México) y la Yakuza (Japón).
El fiscal Martínez reveló que la tregua permitió que algunos jefes policiales se acomodaran a esa medida y que no hicieran su trabajo.
“El mismo proceso de la tregua acomodó mucho al equipo de la Policía y les costó mucho que entendieran que tenían que cumplir con la misión constitucional y que tenían que superar las barreras que existen en la institución policial”, indicó Martínez, quien agregó que hubo que ejercer toda la fuerza que la ley les otorga para que la Policía reaccionara a la apatía al interior de la corporación.
“Tuvimos reuniones duras con jefes de la Policía, hoy ellos lo andan divulgando, celebrándolo. Hasta el Presidente ha salido mencionando los resultados de 2013, pero se les olvidó que ha sido un trabajo fuerte, y de jalones y de apretones de orejas que les hemos dado a jefes policiales, directores y ministros con tal de hacer funcionar el aparato de seguridad del Estado”, dijo Martínez.