Marcelo Posadas, jugador de Santa Tecla FC, que participó en el amistoso contra Venezuela en mayo y en Copa Oro con la Selección, es uno de los últimos dos jugadores bajo sospecha de participar en arreglo de partidos.
Hace cuatro días, otro rotativo señaló que un directivo tecleño reveló a condición de anonimato que Posadas habría aceptado participar en una reunión. Sin embargo, el jugador dijo que esa afirmación es falsa y que tampoco ha platicado con los directivos de Santa Tecla FC.
“Solo tenemos conocimiento de la notificación que hizo la Fesfut sobre la inhabilitación de Marcelo por 30 días. Si el accionar de Marcelo resultase ser incorrecta, como equipo no lo vamos a proteger, pero estamos conscientes de que esto es una medida precautoria y que de momento tiene nuestro apoyo moral y publicaremos un comunicado donde se desmiente que el jugador haya hecho del conocimiento de esta directiva que ha participado en reuniones cuando no hemos hablado con él”, explicó José Vidal, dirigente tecleño.
Mientras se cumple el mes de inhabilitación, Posadas tendrá que defenderse por su cuenta porque “Santa Tecla, como equipo, no intercederá por él, ya que estamos a favor de que el problema de amaños de erradique”, agregó Vidal.
Posadas no puede entrenar con su equipo, pero realiza un trabajo específico por aparte.