En una primera reacción pública, tras el requerimiento fiscal en su contra, el exministro de Economía, Miguel Ernesto Lacayo, explicó que todas las acusaciones que se le hacen no constituyen delitos, ya que actuó apegado a lo que como funcionario estaba facultado para hacer.
“Se me acusa por haber servido al país como ministro de Economía durante una administración, dentro del marco que ordena la Constitución y leyes de la República, se me acusa por haber cumplido con mi deber”, dijo a través de un comunicado hecho llegar a la redacción de El Diario de Hoy.
El exfuncionario también destacó que se le inculpa por haber tratado de aumentar la generación de energía geotérmica para hacer bajar las tarifas eléctricas en favor de todos los consumidores.
“Se me acusa por promover la búsqueda de un socio estratégico para incrementar la producción de energía geotérmica, que colocada en el mercado garantizaría precios más bajos y más estables para la familia salvadoreña”, continúa la nota.
“Se me acusa por procurar que instituciones de reconocido prestigio mundial interviniesen en el proceso de búsqueda de ese socio; y que personas de muy elevada cualificación moral, capacidad y experiencia administraran ese proceso”, añadió.
Además negó que haya instigado a personas a realizar determinadas acciones que riñeran con las leyes vigentes.
Lacayo también lamentó las declaraciones públicas de otra autoridad gubernamental con relación a su empresa, por tratarse de procesos administrativos sujetos a notificación oficial, sin embargo, dijo que confía en que el debido proceso le dará la razón.
“Confío en las instituciones que con el paso de los años van consolidando la garantía del debido proceso para todos los ciudadanos, no obstante en algunos momentos funcionarios que se encontraron en ellas las utilizan para su provecho o en desmedro de sus adversarios”, añadió, tras indicar que hará uso de su derecho a la defensa acorde a la circunstancias que enfrenta, hasta su plena exoneración, mientras reiteró que seguirá trabajando por el país.
“Seguiré con el apoyo de Dios, mi familia y amigos, sin desfallecer, luchando por mejores condiciones de vida para los salvadoreños, expresando libremente mis opiniones, contribuyendo a generar empleo y en cualquier otra misión de bien”, finaliza el comunicado.