Transitar por las calles aledañas a la carretera Panamericana que conduce hacia occidente se ha vuelto problemático desde el pasado 23 de septiembre, fecha en que inició la reconstrucción de la vía.
El proyecto que impulsa el Fondo de Conservación Vial (Fovial) ha generado tráfico pesado. Ayer, a eso de las 10:30 a.m., los automovilistas que circularon por la avenida Jerusalén para llegar a la zona de los centros comerciales y pasar por el redondel de las Naciones Unidas (sin ser hora pico) estuvieron más de 20 minutos en el “nudo” de automotores.
La queja de la conductores fue que “ningún” agente de tránsito estaba en el lugar para ayudar a regular el tráfico vehicular.
“Aquí se hace la ley del más fuerte” opinó Ulises Orellana, uno de los afectados.
Eran las 11:00 a.m. y la fila de automotores se hacía más larga, tanto así que desde el redondel Masferrer hasta el redondel mencionado era una “pesadilla” que muchos tuvieron que vivir, continuó Orellana.
Mientras los automovilistas luchaban con el pésimo tráfico, autoridades de Obras Públicas informaban sobre los avances en la intervención de la Panamericana.
“Somos optimistas y esperamos que antes de diciembre hayamos terminado los tramos intervenidos”, detalló el titular de Fovial, Eliud Ayala.
Por dicha carretera circulaban a diario 90 mil vehículos, los cuales se han visto obligados a utilizar las vía paralelas.
En horas de mayor tráfico la calle Chiltiupán, bulevar Walter Thilo Denninger, Merliot, calle El Espino, entre otras, se vuelven insuficientes para movilizar a los conductores que viajan desde San Salvador hacia Santa Tecla.
Ayala enfatizó la acción conjunta del Viceministerio de Transporte y la Policía Nacional Civil porque “están procurando la ejecución de la obra con menores inconvenientes”, declaración que contrasta con los líos a los que se enfrentan a diario los usuarios de la arteria.
El bulevar Walter Thilo Denninger, en Antiguo Cuscatlán, que conecta por un paso a desnivel con la Panamericana se volvió un caos.
Florencia Ruano se tardó más de 15 minutos para incorporarse a la carretera y luego virar hacia Santa Elena.
“No es la primera que vez que me pasa y tempranito, al mediodía y en la noche se vuelve peor. Parece ser que no se han coordinado bien”, afirmó Ruano.
Los conductores piden a las autoridades solucionar los inconvenientes viales, ya que padecerán con ellos hasta el próximo año que termine la reconstrucción de los carriles en ambos sentidos.