La saturación lleva a recortar el tratamiento

Los pacientes deben de viajar de varios puntos de la región para recibir el tratamiento

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Los pacientes que reciben hemodiálisis deben de estar conectados por tres horas.

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2013-08-18 8:00:00

SANTA ANA. A pesar de que los casos de insuficiencia renal crónica van en aumento en el occidente del país, sólo un hospital público, el San Juan de Dios de Santa Ana, cuenta con un departamento de nefrología donde atienden estos casos en el occidente del país.

Eso provoca la saturación en la sala y los pacientes no reciben sus tratamientos de forma adecuada.

El encargado de esa área en el hospital santaneco, doctor Carlos Salinas, expresó que una persona que es sometida a tratamientos de hemodiálisis, debe de ser tres veces por semana. En el hospital apenas es de dos, debido a la cantidad de pacientes que deben de atender.

Además, la falta de más hospitales que den dicho servicio obliga a los enfermos a viajar grandes distancia para ser tratados.

Por ejemplo, Jazmín Vásquez Macall debe viajar dos veces por semana desde el cantón Galeano de Chalchuapa la hospital, para estar conectada por un lapso de tres horas a una máquina.

Angélica Vásquez, madre de Jazmín, expresó que es difícil viajar, sobre todo porque lo hacen en autobús del transporte colectivo.

Cada vez que Jazmín sale del tratamiento debe de esperar varias horas para que se recupere y emprender el viaje de regreso a Chalchuapa.

Relató que a su hija le descubrieron la enfermedad cuando apenas tenía 12 años. Ahora tiene 22.

Jazmín es una de los 214 pacientes que atiende el área de nefrología del centro asistencia de Santa Ana, cuando la capacidad es de sesenta personas, en promedio.

Pese a esas limitaciones, el doctor Salinas dijo que actualmente cuentan con 11 máquinas para hemodiálisis y veinte de diálisis peritoneal.

De ellos, 89 están recibiendo hemodiálisis, 110 diálisis peritoneal y 15 en diálisis ambulatoria.

Del total de pacientes, menos del 25 por ciento es atendidos a diario en esta área (27 en hemodiálisis y 20 en diálisis peritoneal).

A eso se suma que el centro sólo tiene un especialista en esta especialidad.

“Hace dos años eran 59 pacientes en hemodiálisis, la tendencia de diálisis peritoneal siempre era de entre 100 y 110 y de diálisis ambulatoria eran cinco. Siempre hay un incremento”, dijo Salinas.

El director del centro asistencial, doctor Ramón Ábrego, dijo que de los 20 millones de dólares de presupuesto que recibieron el año pasado, $980 mil fueron destinados a darle asistencia a los pacientes con insuficiencia renal.

Es decir que el hospital gasta $4,579.44 al año por cada uno de los 214 pacientes que atiende en este departamento.

“Este hospital tiene una gran carga de trabajo”, expresó el galeno en referencia a la cantidad de pacientes que reciben en nefrología.

“Dado el perfil epidemiológico de lo que hoy tenemos esa sería la orientación. No es fácil porque según las evaluaciones de los organismos internacionales, la carga de enfermedad que está teniendo América Latina implica gran inversión e ir readecuando”, dijo el director al ser cuestionado si en el resto de hospitales de la región necesitan un área de nefrología.

El director expresó que prevén readecuar un lugar cerca de nefrología para instalar ocho camas que sirvan para que los pacientes que están ingresados y que requieran de hemodiálisis o diálisis peritonial, estén más cerca.

Aunque no detallo cuándo podrían iniciar los trabajos de readecuación, sí dijo que la inversión será de $75 mil.

Las causas

El doctor Carlos Salinas expresó que el 40 % de los pacientes que consultan no le logran determinar las causas de la enfermedad, debido a que cuando llegan al centro asistencial, el padecimiento ya está muy avanzado.

En el resto sí pueden detectar la causa.

Agregó que el 90 % de los pacientes llega a consultar cuando su piel está pálida, lo que significa que el riñón sólo está trabajando en un 30%.

El doctor Salinas dijo que el uso de analgésicos y agua que no es potable puede provocar que se desarrolle la enfermedad.